Las negociaciones entre el PSOE y el PNV para intentar sacar adelante los presupuestos generales de 2011 están en marcha y el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ha reconocido hoy que, por el momento, tiene una impresión "favorable" sobre esos contactos.

En una conversación informal con periodistas en los pasillos del Congreso después de que el pleno aprobara definitivamente la reforma laboral, Zapatero se ha mostrado optimista a pesar de reconocer de que queda camino por delante y de puntualizar que no es él quien está dirigiendo las negociaciones sobre las cuentas del Estado del próximo año.

Ayer mismo el vicepresidente tercero del Ejecutivo, Manuel Chaves, admitió que hay "reuniones, llamadas y encuentros" con los nacionalistas vascos.

Uno de los asuntos en negociación es el traspaso de las políticas activas de empleo, donde el Ejecutivo ha asegurado que se respetará "escrupulosamente" la caja única de la Seguridad Social y que se garantizará que esa transferencia no represente "ninguna merma" de ingresos para ese organismo.