El director de la Agencia Tributaria, Juan Manuel López-Carbajo, ha anunciado que en los últimos tres años se han enviado a los tribunales alrededor de 2.000 expedientes de delito fiscal por un importe total de 2.000 millones, con lo que la defraudación media por delito se sitúa en un millón de euros.

López-Carbajo indicó, en una entrevista con Europa Press, que cada año se han enviado a los jueces más de 600 expedientes por delito fiscal, que son aquellos fraudes que superan los 120.000 euros y que pueden conllevar penas de prisión de entre uno y cuatro años, así como una multa hasta seis veces superior a la cuantía defraudada.

López-Carbajo señaló que, a estos expedientes que cuentan ya con un propuesta de liquidación previa, hay que sumar las investigaciones que Hacienda envía a los tribunales en los que no está cuantificado el importe defraudado porque se remiten en una fase muy previa de la inspección fiscal, ya que están relacionados con tramas corruptas de gran envergadura, como los casos Malaya, Pretoria o Palau.

El director de la AEAT se refirió a la última operación llevada a cabo por Hacienda sobre los titulares españoles de 3.000 cuentas en la filial suiza del HSBC, y aseguró que, una vez terminada la primera fase del procedimiento de investigación -aprovechado por algunas de estas grandes fortunas para regularizar su situación con el fisco-, ahora se inicia la siguiente fase y de los casos que pueda derivarse delito fiscal, se remitirán a los tribunales.

La Agencia Tributaria ha iniciado un procedimiento de inspección sobre los titulares de las 3.000 cuentas de la filial suiza del HSBC, a quienes ha citado a partir de este mes para realizar comprobaciones que podrían culminar con el envío a la jurisdicción penal por delito fiscal, después de que el pasado 30 de junio expirara el plazo que Hacienda les concedió para regularizar su situación con el fisco.

Por otro lado, López-Carbajo concretó que la Agencia Tributaria ha incrementado la recaudación directas por actuaciones contra el fraude en más de un 20% hasta agosto, algo que, aseguró, "no es nada fácil" y exige un gran esfuerzo por parte de todos los empleados de la AEAT.

Asimismo, avanzó que el plan de prevención del fraude fiscal para 2011 seguirá poniendo el acento en el uso del dinero en efectivo, labor que ha permitido ingresar hasta junio de este año alrededor de 900 millones de euros, y recordó que la Agencia Tributaria se empezará a beneficiar de la información relativa a las operaciones de más de 3.000 euros que las entidades financieras están obligadas a recopilar desde este año.

Asimismo, el plan se empleará a fondo en el seguimiento del fraude del IVA intracomunitario, el uso de facturas falsas, el abuso de incentivos fiscales, de las estructuras fiduciarias y los paraísos fiscales. "También seguiremos investigando el sector inmobiliario", señaló también el director de la AEAT, quien explicó que, dada la menor actividad residencial, las labores de control también se verán reducidas.