Como resultado, y para impedir ese empeoramiento, decidieron una compra sustancial de deuda hipotecaria y del Tesoro.

"El deterioro de las condiciones en el mercado laboral fue rápido en los últimos meses, con fuertes reducciones de las plazas de empleo en todos los sectores", indicaron las minutas.

Además, "la producción industrial continuó a la baja como reacción a la caída en la demanda y el aumento de los inventarios", según señalaron.

"El crédito se ha hecho muy restringido, se mantiene la fragilidad e inestabilidad de los mercados de capital y se intensifican las presiones sobre las instituciones financieras", señalaron.

A esa situación contribuyó una merma de la actividad económica externa, según las minutas.

Al final de la reunión entre el 17 y el 18 de marzo, la Reserva Federal anunció planes para comprar 300.000 millones de valores a largo plazo del Tesoro así como 850.000 millones de deuda hipotecaria con el fin de aumentar la liquidez.

También las autoridades de la Reserva mantuvieron los tipos básicos de interés en entre 0 y 0,25 por ciento.

Según las minutas, durante el encuentro los miembros de la Reserva indicaron que existen pocas posibilidad de una subida de la inflación por el mayor desempleo y la reducción del consumo que se han constituido en un freno para los aumentos de salarios y precios.

La tasa de desempleo en Estados Unidos se elevó al 8,5 por ciento en marzo, la más elevada desde 1983.

"Varios miembros manifestaron su preocupación ante la probabilidad de que la inflación se mantenga por debajo de los niveles deseados y algunos advirtieron sobre el riesgo de deflación", según las minutas.

Por otra parte, indicaron que no se podía interpretar como el comienzo de una nueva tendencia un leve aumento registrado en la construcción de vivienda, aunque también indicaron que es improbable que el sector sufra una mayor caída, según las minutas.

En sus últimas proyecciones trimestrales, la Reserva Federal pronosticó que la economía de EEUU tendrá una contracción de 0,5 a 1,3 por ciento este año, mientras que en el 2010 crecerá entre 2,5 y 3,3 por ciento.