Sin apenas tiempo para paladear la victoria cosechada en el Ángel Nieto frente a UE Sarriá ni para disfrutar del aroma a garrapiñada, el Zamora Rutas del Vino dejará mañana la hoy concurrida capital del Duero para visitar al BM Lalín en la tercera jornada de la lucha por la permanencia. Un capítulo liguero en el que los pistacho intentarán alargar su buena racha de resultados y empezar a marcar diferencias significativas en la clasificación.

A diferencia de en meses anteriores, el vestuario del Zamora Rutas del Vino rezuma confianza. Así lo indican tanto el técnico, Ricardo Margareto, como el jugador Sergio Sarasola. “Después del empate fuera y la victoria clara en casa, el equipo está con confianza y muchas ganas de afrontar un nuevo envite para acercarse más al objetivo de la salvación”, asegura el entrenador, mientras que el primera línea recalca que “el grupo sabía que estos tres primeros partidos de la segunda fase iban a ser muy importantes” y quiere “aprovechar la muy buena dinámica” en la que se encuentra ahora mismo.

Sin embargo, en el seno de la primera plantilla del BM Zamora no se afronta el partido a la ligera. Los buenos resultados no impiden ver a BM Lalín como “un rival muy duro” y “difícil de batir en su feudo. “Son un adversario complicado, acabó la primera fase con los mismos puntos que nosotros y llegarán dolidos tras no sumar en los últimos partidos”, razona un Sergio Sarasola que conoce bien al cuadro gallego, destacando que “está formado por jugadores muy experimentados que saben siempre que hacer”.

En línea similar se expresa Margareto, que además de coincidir en el análisis de su jugador también resalta “la fortaleza como local” de un BM Lalín “al que este club se ha medido muchas veces en Primera Nacional y sabe de la fuerza que tiene con todo su público”.

“Presionante en defensa, atento a las líneas de pase para salir rápidamente en busca del gol dominando los tiempos”, según el entrenador, BM Lalín pondrá a prueba la capacidad física de un Zamora Rutas del Vino que seguirá sin poder contar con Andrés, Nacho y Dela.