El BM Zamora Rutas del Vino no pudo pasar del empate a domicilio ante otro equipo con historia como es la SD Teucro, y firmó las tablas en la primera jornada de la fase por evitar el descenso de categoría. Los discípulos de Ricardo Margareto jugaron un partido muy serio de principio a final e incluso comandaron el marcador durante mucho más tiempo que los pontevedreses, especialmente tras el paso por los vestuarios, pero no supieron jugar con calma en la parte final del duelo y la victoria se escapó.

El partido comenzó tenso con dos seis cero duras y correosas que no dejaban apenas espacio para el lanzamiento. Así aunque Aravena abrió el marcador a las primeras de cambio el duelo estaba muy cerrado y defensivo. No sino después de muchos intentos el Teucro marcaba la primera alternancia desde los siete metros (2-1 en el cinco), una distancia penalizada de nuevo por los colegiados para el inmediato empate zamorano. Y es que nadie dejaba que se lanzara con comodidad y los agarrones eran constantes.

Una finalización liberada tras un gran dos contra uno, más una defensa enorme que trajo consigo dos contras para explotar la velocidad zamorana provocaron el tiempo muerto de la entrenadora local Irene Vilaboa en el minuto once (2-5), pues en un encuentro con aroma a Asobal, pese a que lo que se jugaban era el descenso, dejar que el rival cogiera una renta sustanciosa podría ser definitivo.

De vuelta al juego y con las porterías casi inéditas los gallegos terminaron con su sequía anotadora, pero no supieron frenar las rápidas transiciones zamoranas y encajaron una nueva contra letal y una segunda exclusión que los ponía en problemas (4-6 al cuarto de hora). Pero entonces Sarasola era descalificado de forma rigurosa por golpear con su brazo en la cara de un rival que se avalanzó sobre él y aunque Lautaro aparecía para parar el penalti no dejaba de ser un contratiempo reseñable. Sin embargo, un minuto más tarde el local Guillermo García era descalificado por idéntico motivo en una acción casi calcada y los árbitros dejaban claro que no querían brusquedades no contactos tan duros.

Superado el minuto veinte el Zamora mantenía los dos goles de renta (6-8), pero entonces el portero pontevedrés Werbmter aparecía por primera vez y el empate no tardaba en producirse (10-10 a falta de siete para el descanso). De ahí a la llegada del descanso el partido volvió a endurecerse y a cerrarse por completo, pero el Zamora fue castigado mucho más pues sufrió dos exclusiones. Aún así la igualdad permaneció dejando todo por resolverse para la segunda mitad (12-12).

En el reinicio el Zamora salió mordiendo y con un Aravena letal, por lo que pese a fallar un siete metros marcó un parcial de 0-3 que hizo mucho daño a un Teucro que además jugaría entonces en inferioridad. Pero la renta no duraría ya que en el siguiente tramo los pontevedreses mejoraron en todas las facetas y devolvieron el parcial encajado (16-16 en el minuto ocho).

El encuentro se animó, más tras un bonito intercambio de golpes en el que nadie conseguía imponer su estilo durante demasiado tiempo, pero una vez más y aunque con diferencia mínima los zamoranos jugaron a favor de marcador y en el siguiente tramo se verían empates y desempates sucesivos hasta el 21-21 en el minuto veinte, cuando el Teucro tomó la delantera por primera vez tras muchos minutos a remolque.

Pero duró poco porque el Zamora no desaprovechó una exclusión gallega y se puso de nuevo arriba a falta de cinco minutos para la conclusión (22-23). Todo se complicaba cuando Jaime González veía un dos minutos, pero en ese momento tan delicado aparecía Lautaro para insuflar aire a un grupo que acusó muchos nervios en ataque en un final de infarto (23-23 a falta de 20´´ y pelota para los locales) y que se salvaría sobre la bocina con otra parada de Lautaro.