El MMT Seguros perdió ayer una oportunidad de oro para afianzarse en la primera posición de la División de Honor Plata y cayó derrotado en tierras cordobesas ante un potente ARS Palma del Rio que, con el 23-18 final, se encarma ahora a la alto de la tabla y provoca un claro paso atrás de los zamoranos.

El choque fue tremendamente emocionante pese a no resultar demasiado vistoso de ver para el espectador, ya que los dos conjuntos ofrecieron un juego basado casi en exclusividad en las cuestiones defensivas y ninguno de los dos quiso arriesgar lo más mínimo, exhibiendo ambos dos seis cero correosas y muy aguerridas que evitaron en todo momento dejar espacios libres.

Pese al mucho contacto que hubo entre dos sietes que no dudaron en derrochar esfuerzo físico, el partido se jugó siempre de forma muy deportiva y es un hecho que merece la pena recalcar porque hubo momentos de mucha tensión. También que la actuación de los colegiados ayudó mucho, porque estuvieron a un gran nivel y supieron redirigir los momentos más transcendentales y reñidos, que no fueron pocos.

La primera parte fue la más cerrada de las dos, con dos defensas que rozaron la perfección y dos porterías rindiendo siempre a gran nivel, con un Leo Maciel mostrando el excelente nivel que tiene y un Manu López que quizás no brilló tanto pero que también fue decisivo.

El primer periodo estuvo siempre apretado y peleado. Del 2-4 se pasó al 5-4 al cuarto de hora, quedando claro que ni cordobeses ni zamoranos iban a romper el duelo antes del descanso, al que ambos fueron incapaces de llegar con diez goles.

El pírrico 9-9 que reflejó em marcador hacía bastante justicia a lo sucedido sobre la pista, donde las "seis-cero" se impusieron por completo al resto de aspectos del juego y que ninguno de los dos varió, salvo unos instantes los locales en el comienzo de partido por una cinco uno que rápidamente retiraron los locales.

La segunda mitad resultó más abierta, Octavio Magadán brilló en su inicio y tiró de repsonsabilidad para aguantar a los suyos, 12-12. Los equipos parecieron menos encorsetados en los respectivos esquemas tácticos impuestos por sus técnicos, que no obstante siguieron haciendo de la defensa la base fundamental sobre la que cimentar sus opciones de triunfo. De hecho, al poco la portería local se cerró por completo y los locales firmaron un parcial de 5-0 que lo cambió todo, aunque Octavio volvió a aparecer para colocar el 18-15 a falta de diez minutos.

Precisamente los andaluces encontraron la clave del éxito en poder frenar al leonés, clave en el juego zamorano, así como a Jortos, que estuvo siempre muy vigilado y no pudo desplegar su juego habitual.

Los visitantes siguieron sin encontrar la pausa necesaria en ataque y les costó dios y ayuda encontrar algún espacio libre, por lo que en demasiadas ocasiones acabó con lanzamientos desde posiciones nada cómodas que no llegaron a buen término. Cabe decir que el MMT Seguros Zamora sólo tuvo cierta continuidad en ataque desde el costado, tanto con su lateral izquierdo como con su extremo, pero por otra parte la conexión con el pivote resultó siempre farragosa y poco efectiva en los duelos individuales, lo que hizo que hubiera precipitaciones en un MMT Seguros que se amparaba en su defensa para resistir.

En un duelo tan apretado, donde nunca se vieron distancias siquiera reseñables, casi siempre mínimas, así como alternancia en el marcador y algo menos en el control del juego pues ninguno de los dos fue capaz de imponer su balonmano al otro durante demasiados minutos, todo acabaría decidiéndose en los últimos diez minutos de enfrentamiento. En ese momento los de Palma del Río exhibieron mayor puntería y acabaron por coger una renta de dos tres goles que resultó decisiva para afrontar el final con cierta tranquilidad e incluso conseguir una diferencia que no refleja lo sucedido. Los zamoranos pelearon su suerte hasta el último minuto pero en ese tramo final no estuvieron no tuvieron el acierto necesario para evitar dar un paso atrás en sus aspiraciones.