Sufridísima victoria por 29-30 la conseguida ayer por el MMT Seguros Zamora en casa del BM Alcobendas. Los de García Valiente tuvieron que luchar y mucho para poder batir a un Alcobendas que se fue al descanso ganando por 17-13 y dejando en muy mala impresión al conjunto zamorano. Sin embargo a base de goles y reorganización efectiva en defensa, lograron dar la vuelta al marcador y sobreponerse en el último minuto a los madrileños. En parte, gracias a los siete goles firmados por Adrián Prieto y por Ceballos, así como los logrados por Octavio o Mouriño, sin olvidar a un Leo Maciel espectacular tras el descanso.

Las opciones de estar en la zona alta de la tabla pasa por ganar en pistas difíciles como lo es el Pabellón de los Sueños de Alcobendas. El MMT Seguros Zamora se desplazaba a Alcobendas a dos puntos de la cabeza de la clasificación sabedores que puntuar allí puede ser determinante en la temporada, ya que los locales todavía no habían perdido en su feudo donde, además, los zamoranos no acostumbran a ganar.

Sería Octavio el primero en inaugurar el marcador al aprovechar su propio rechace desde unos 7 metros. Bien cerrado en defensa y con Leo apareciendo en portería, el MMT Seguros se puso 0-2 en el minuto cuatro gracias a otro tanto de Octavio. El partido era rápido, con transiciones eléctricas y buena definición ante los porteros lo que hizo subir el tanteo como la espuma (3-5, min. 6). Defensa con avanzado para Alcobendas, que forzaba a los "guerreros de Viriato" a buscar los extremos y olvidarse del pivote Gastón.

La renta se mantenía dos goles a favor de los zamoranos (5-7, min. 11) y Leo Maciel contribuía con sus paradas a mantener esa pequeña ventaja aunque un par de errores hicieron que el Alcobendas empatase antes del minuto 12. Las precipitaciones hacían aparición en el MMT Seguros y se pagaban con goles en contra (9-7, min. 14) a los que respondió un exjugador de los madrileños, Adrián Prieto, para equilibirar el tanteo (10-9).

La reacción, sin embargo, no duró. Por ello, en el minuto 18, con 12-9 en el luminoso, García Valiente se vio obligado a pedir un urgente tiempo muerto para intentar reconducir el partido.

El receso no tuvo gran impacto en el juego. El encuentro se torcía para los de Viriato y con 14-10 en contra, García Valiente se sentó en el banquillo. Miraba a su alrededor y no veía solución a la falta de acierto de sus hombres que, tras fallar tres lanzamientos, se situaban cinco goles por detrás de un BM Alcobendas al que solo hacía daño era Adrián Prieto en las pocas ocasiones que pudo lanzar.

El choque era rápido, al ritmo que le gusta al cuadro madrileño cuyas rápidas transiciones hacían mucho daño al MMT Seguros, haciendo productivas las paradas de un Manu Rodríguez que fue una pesadilla para Guille, Gastón o Jortos que se estrellaban contra él en sus lanzamientos.

Muchos fallos dejaban ver a un Zamora nervioso e irreconocible en Alcobendas, quizás por mérito local o quizás porque no se esperaban ir claramente atrás en el marcador. El gol de Jortos en el último minuto del primer tiempo dejó el 17-13 camino del descanso de un duelo que se auguraba con terrorífico final para los visitantes.

Mucho tardaron los jugadores zamoranos en volver a la pista por lo que se intuyó repaso de García Valiente en vestuarios. Y no pareció que surtiera efecto en los primeros minutos de la reanudación ya que a los 40 segundos, Adrián Prieto era excluido.

Octavio volvió a aparecer para seguir sumando goles importantísimos para el MMT Seguros, lo mismo que hizo Catalina para los locales ya que un doblete suyo significó el 20-15, min. 34.

Por mucho que luchaban los "guerreros de Viriato", la renta se mantenía apenas unos segundos por debajo de los cuatro goles. Los tantos de Ceballos o Adrián Prieto ayudaban a los zamoranos a mantenerse vivos en el encuentro pero no eran suficientes para resurgir.

Daba la impresión de que los dos puntos estaban próximos a quedarse de nuevo en el Municipal de los Sueños pero, con la madera como ayuda, el MMT Seguros cambió su destino a base de garra. De no bajar los brazos.

Ceballos hacía daño desde el extremo izquierdo y un gol suyo redujo la distancia al 23-20 en el 41. Antes de una nueva exclusión, Adrián anotaba su sexto tanto del partido logrando el 24-22 mediada la segunda parte. Habían despertado los de Viriato, cuyo juego compacto por fin se veía acompañado de efectividad, lo que le faltó en el primer acto. Así lograron ponerse a un gol de diferencia (24-23, min. 46) forzando al técnico local a pedir tiempo muerto.

Ya llovía menos en Alcobendas para un MMT Seguros que se había puesto a carburar y que, resguardado en Leo Maciel, iba a pelear hasta el final. El meta, con paradas espectaculares, permitió que los suyos respondieran a un buen parcial madrileño y alcanzaran el empatea 27 a seis minutos para el final con un tanto de Gastón.

Los últimos cinco minutos fueron de infarto ya que Peli fallaba un mano a mano en una contra solitaria el 27-28 que hubiese dado la vuelta al marcador. El que no fallaba era Ceballos cuyo séptimo gol de la tarde culminaba la remontada zamorana, a la que siguió un intercambio de goles con el que se llegó a seis segundos para el final, momento en el que Leo Maciel detuvo el último tiro del encuentro para convertir la pesadilla de la primera mitad en un triunfo de ensueño (29-30).