El Construcciones Tevisa logró ayer dos puntos con gran comodidad al imponerse por 34-18 al BM Aranda Disaroil en un duelo tan plácido como cabía prever para el filial zamorano.
Ni las continuas rotaciones ni los errores típicos que surgen con la falta de intensidad asociada a este tipo de envites tan desiguales. Al Construcciones Tevisa le bastó con su calidad y algo de sobriedad para poner fin a la mala racha en la que había entrado.
La contienda duró pocos minutos. Los que tardó el equipo de Fran Tejado en distanciarse a más de tres goles en el marcador. A partir de ahí, el BM Aranda Disaroil quiso pero no pudo porque, entre otras cosas, a día de hoy no tiene los recursos ni el talento de los zamoranos.
Por ello, y pese al constante reparto de minutos, la brecha en el marcador fue haciéndose más y más grande. Llegó a ser de seis goles al descanso y, pese a cierta relajación en la segunda mitad de los locales, pronto llegó a ser una diferencia de dos dígitos.
El buen desempeño bajo palos de Iván y Aleix, la tenacidad de los más veteranos y la ilusión del puñado de juveniles convocados terminó por enterrar a un BM Aranda que cayó por 34-18. Un claro triunfo del Construcciones Tevisa que dio la impresión de haber podido ser más amplio si el filial así lo hubiera necesitado.
