Sevilla.- El Sevilla tiene hoy la oportunidad de confirmar en "Champions", ante un Steaua en crisis, la mejoría demostrada el pasado sábado ante el Levante en Liga y, de paso, consolidar sus aspiraciones de clasificarse entre los dos primeros puestos del Grupo H de el máximo torneo continental.

Sin duda los blanquirrojos son favoritos, no sólo por su mayor potencial, sino porque marchan segundos de grupo, con 3 puntos, mientras que los rumanos son últimos y no conocen aún el triunfo.

De hecho, el Steaua le trae buenos recuerdos al Sevilla. No en vano, ambos conjuntos se enfrentaron en los dieciseisavos de final de la Copa de la UEFA la pasada temporada, con sendos triunfos nervionenses por 0-2 en Bucarest y 1-0 en la capital hispalense.

Además, a los de Juande Ramos el ya mencionado triunfo ante los levantinistas les ha permitido recuperar la confianza que parecían haber perdido en el último mes, aunque su entrenador no deje de advertir sobre las carencias que aún muestra el equipo.

Sin duda una de ellas es la facilidad con la que los rivales hacen gol ante el portal sevillista, como ya ocurriera en el último partido de "Champions", cuando un débil Slavia de Praga marcó dos tantos en sus sendas y únicas aproximaciones al área.

Sin embargo, Juande tiene disponibles para este partido a todos sus "pesos pesados", a excepción de los lesionados Javi Navarro, Maresca, Kerzhakov y Escudé, mientras que Chevantón, Hinkel y Fazio se quedan fuera de convocatoria por decisión técnica.

Lo principal, sin embargo, es el regreso de Kanouté, repuesto de los problemas físicos que le impidieron jugar en Valencia. Ello, unido a la vulnerabilidad del Steaua hace que todo lo que no sea una victoria andaluza pueda considerarse como una auténtica sorpresa.

En cuanto al Steaua, se encuentra sumido en una crisis más que evidente. El que fuera campeón de Europa en 1986 en el propio Sánchez Pizjuán vive a la sombra de su controvertido presidente "Gigi" Becali, que ha primado a sus jugadores con 30.000 euros para esta visita al Pizjuán, pero cuyas intromisiones en el capítulo técnico hicieron que Gica Hagi dimitiera como entrenador tras la primera jornada de esta Liga de Campeones. Su sustituto es el italiano Massimo Pedrazzini, que encajó otro revés, frente al Slavia, en la segunda jornada. Con una plantilla claramente mejorable y séptimo en su liga, el "Barcelona del Este afronta el partido como una final.