Saulo Hernández, entrenador del CB Zamora: "Es un año que se nos quedará grabado en la memoria"

Tras dar por concluido el último partido de Liga en el Ángel Nieto y felicitar al rival por ser “justo vencedor del partido”, Saulo Hernández habló de lo sucedido en pista ante Alega Cantabria y cree que los suyos entraron “20 minutos tarde a nivel mental”. “Éramos conscientes, o al menos yo lo era, de lo complicado que es después de muchos meses dejándote todo para conseguir un sueño, unos días después de lo lograrlo seguir apretando. Aunque le dices que sí a la cabeza, no es fácil”.

Al final, comentó, con ayuda del público “hemos entrado en el partido y hemos hecho lo que sabemos hacer: luchar y dar todo hasta el último minuto, independientemente del resto”. “Creo que el deporte es más que ganar o perder, aunque es lo que prima. Si hay que perder y acabar la temporada de una manera, es de esta”, apuntó el entrenador del Caja Rural CB Zamora. “Que haya un punto de pena y resignación porque esto se acaba, y la gente sabe que hay jugadores a los que no volverá a ver quiere decir que se lo han pasado bien con nosotros y están identificados”.

También la afición se volcó y homenajeó a Saulo Hernández por el trabajo realizado y él, aunque entiende que es la cara visible, recordó que hay “mucha gente válida detrás, además de los jugadores”. “Nos hemos sentido afortunados de ir en un barco con tanta gente dentro, nos hemos sentido muy queridos, y este final es una muestra de ello. No ha habido reproches sino agradecimiento. Es un año que a todos se nos quedará grabado en la memoria”.

En la rueda de prensa pospartido también comentó que “hay que ser conscientes de que estamos en una Liga más dura a nivel deportivo de lo que yo creía, y pienso que hemos hecho una temporada casi perfecta”, explicó el entrenador zamorano quien añadió que “si pensamos que por haberlo conseguido una vez es más fácil, yo tengo muy claro que es al revés. Este año hemos tenido un plus de ilusión que mueve montañas, pero para estar aquí hacen falta más cosas. La sensación es que estábamos jugando en el patio de los niños pequeños y de repente nos cambiaron al patio de los mayores, y juegan muy bien y saben mucho de baloncesto. Es una Liga que he disfrutado enormemente y que acabo más cansado que ningún año por la gran exigencia”, concluyó.