Carlos Ramos marca en Zubieta 14 años después de su debut en Segunda B con el Zamora CF

Fue el 20 de febrero de 2011 cuando Carlos Ramos debutaba en Segunda División B con el Zamora CF. Lo hizo con 16 años y de la mano de Roberto Aguirre quien no dudó a la hora de dar entrada a la «joven promesa rojiblanca» que estuvo en el terreno de juego toda la segunda parte, con ocasión de gol incluida, aunque su disparo en aquel momento, desde unos 30 metros, se estrelló contra el poste derecho. Este sábado, 14 años después, sí entró. Era una falta perfecta para él y entró hasta el fondo de la red dando el 0-1 y, a la postre, tres puntos de oro al equipo rojiblanco que vuelve a mirar hacia arriba en la tabla, puesto que está a tres puntos del play-off, aunque con mucho respeto. 

Al término del encuentro ante la Real B, Carlos Ramos admitió que la vio «clara». «Era mi distancia y tenía confianza. Aquí debuté con el Zamora y le di al palo en esa portería, y sabía que podía meterla», comentó el jugador quien dio más importancia al hecho de haber podido ayudar al equipo y refrendar que están en un gran momento. No obstante, ese gol también sirve para recordar a aquel joven juvenil que salió al campo de Zubieta con 16 años con nervios por su «estreno» con el primer equipo y que ahora anota convertido en uno de los capitanes.

Carlos Ramos: «Tuve los típicos nervios del debut»

Más allá del gol, Ramos no fue el único que hizo un gran papel en Zubieta y es que el equipo rojiblanco supo jugarle al filial de Sergio Francisco. «El equipo lleva una buena dinámica. Llevamos partidos muy serios, más allá de que nos empataran el otro día al final, es cierto que el equipo se crece ante las adversidades y ante los equipos buenos». Así se expresó Carlos Ramos al término del encuentro, haciendo especial hincapié en cómo el equipo afrontó la baja de Kike Márquez. «Es una ausencia muy importante y sabíamos que teníamos que dar un paso adelante todos, y pienso que, como en la ida, se ha hecho un partido muy serio, trabajando mucho y sabiendo que el filial de la Real es un equipazo, de los mejores de la categoría», apuntó el zamorano que admitió también que dejaban Zubieta contentos y orgullosos del trabajo realizado.

«Este Zamora CF compite muy bien cuando está concentrado al 100%. Tenemos jugadorazos. Se ve con los equipos de arriba y esperemos que siga porque estamos en la mitad del Tourmalet. Nos quedan dos partidos muy importantes en casa y vamos a intentar sacar los 6 puntos en casa para poder soñar», zanjó el jugador quien, al igual que Juan Sabas, agradeció la presencia de aficionados que siempre los arropan fuera, hecho que «se agradece muchísimo». «Que sigan así, estamos ilusionados y aún quedan muchas batallas por jugar». 

A tres puntos del quinto

Para acabar, y viendo la buena situación en la que están en la tabla (séptimos a 3 puntos de la fase de ascenso) recordó que cada vez que han mirado hacia arriba en la clasificación «nos han dado un golpe de realidad», por lo que prefiere ir «partido a partido, con tranquilidad» sin negar que «de ilusión también se vive y hay que estar ilusionados».