Vintorobike regresa este domingo con una quinta edición sin grandes cambios

El Ayuntamiento de la localidad de Toro fue hoy escenario de la puesta de largo de la quinta edición de la Vintorobike, una prueba deportiva no competitiva que nació en 2016 y que, a día de hoy, es una de las más concurridas dentro de su modalidad en la provincia. Una cita que pretende convertirse, un año más, en una fiesta sobre dos ruedas que de color y alegría un domingo más a la ciudad de Doña Elvira.

Así se indicó en su presentación, señalándose desde el consistorio toresano que "esta prueba ha crecido de manera espectacular" año a año, pese "al parón por dos años de la pandemia" y que genera "gran riqueza por su socialización y buen ambiente" en Toro. "La gente viene a divertirse y pasar un gran día, demostrando su amor por la bicicleta buscando disfrutar de los avituallamientos y de un día extraordinario", comentó el alcalde Tomás del Bien, celebrando "un domingo más de deporte con la ciudad llena" en el calendario.

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La V Vintorobike llega sin cambios trascendentes en su itinerario y desarrollo, según comentaron desde la organización, apuntando como gran novedad la entrega en esta ocasión de un chaleco patrocinado por la DO Toro la Ruta del Vino de Toro y el Ayuntamiento de Toro a cada deportista como recordatorio de su participación.

La quinta edición de esta carrera volverá a contar con dos recorridos: uno corto, de 45 kilómetros con 900 metros de desnivel; y otro largo, de 70 kilómetros y 1.500 metros de desnivel. Ambos partirán del arco de Corredera, a las 9.00 horas del domingo y tendrán su meta en la plaza de la Colegiata, finalizando la jornada con una comida de hermandad en el pabellón municipal de Toro a la que está prevista la asistencia de 600 personas.