Fútbol

Haller grita "que le jodan al cáncer": anota su primer gol con el Borussia tras superar la enfermedad

El delantero costamarfileño del Dortmund vio puerta por primera vez desde su regreso tras recuperarse de un tumor testicular que le mantuvo fuera meses

Los jugadores del Borrusia Dortmund celebran el gol de Sébastien Haller ante el Friburgo.

Los jugadores del Borrusia Dortmund celebran el gol de Sébastien Haller ante el Friburgo.

Denís Iglesias

"Es el partido idóneo" debió pensar Sébastien Haller, jugador del Borussia Dortmund que se estrenó como goleador del equipo alemán el Día Mundial contra el Cáncer, enfermedad que le fue diagnosticada a finales de julio del año pasado y contra la que luchó durante meses hasta regresar a la actividad en enero. El ex del Ajax anotó el 3-1 contra el Friburgo con un remate de cabeza a pase de Julian Brandt.

La celebración del tanto hizo caerse a Signal Iduna Park, que se fundió en una ovación con Haller y sus compañeros. El delantero costamarfileño señaló la inscripción que lleva en una de sus botas: "Fuck cancer ('que le jodan al cáncer')". Uno de los delanteros más destacados de la campaña pasada volvió a sentirse goleador. Lo había intentado sin éxito en las tres jornadas anteriores, en las que logró una asistencia, pero al fin se desquitó este sábado.

De Robben a Molina

Lo hizo en un día especial para todos los que están y estuvieron en su situación. Hace unas semanas, Kirian Rodríguez, futbolista de la UD Las Palmas, anunciaba que había superado un linfoma de Hodgkin. Haller padeció un cáncer de testículos, misma enfermedad que sufrió Arjen Robben cuando tenía solo 20 años y acababa de fichar por el Chelsea.

Pasó por estas circunstancias José Francisco Molina siendo portero del Deportivo o Yeray Álvarez, actual jugador del Athletic. Jonas GutiérrezLubo PenevCarlos Ángel RoaSergio Aragoneses fueron otros jugadores que consiguieron vencer a esta enfermedad, cuya se reivindicó durante el Borussia - Friburgo.

Antes del encuentro y durante el descanso se añadió un bulto en el círculo central que simboliza un tumor testicular. Durante este tiempo, Haller ha narrado un angustioso combate que ya había sufrido colateralmente. “Llamé a mis hermanos y a mi hermana para decirles que estuvieran con mi madre por la noche, porque mi tía, que también era su mejor amiga, murió de cáncer en febrero de 2020. Sigue siendo un trauma en la familia y sabía que se tomaría la noticia con mucha dificultad”, contó el delantero en una entrevista con L' Equipe.

"Destrozado"

Al delantero del Dortmund la enfermedad le quebró la existencia. "¿Por qué tener miedo? Si algo va a pasar, pasará. Si tienes cierto control puedes tener miedo, pero aquí no me quedaba más remedio que confiar en los médicos", reflexionó Haller, que se sometió a dos intervenciones y a cuatro sesiones de quimioterapia de cinco días cada una.

"El tratamiento destrozó mi cuerpo desde dentro. Se me hundieron los ojos, se me cayó el pelo, se me pusieron los labios negros... Debido al catéter en la garganta me quedé sin voz", relató el costamarfileño.

Haller ha regresado de modo definitivo, pero sigue con el retrovisor puesto por miedo a una recidiva. Sabe que tiene que cuidarse y controla milimétricamente todas sus variables. "Es lo que he hecho y tener los datos de seguimiento. Así puedo evaluar las intensidades y tener una visión general de mi estado", aseguró en una entrevista con Bild. Precaución y contención que quedaron en un segundo plano con un gol simbólico que celebraron hasta los seguidores del Friburgo. Porque en el partido del cáncer solo hay un equipo.