El Zamora CF golea al segundo clasificado y se coloca en puestos de permanencia

El equipo rojiblanco suma así la tercera jornada sin conocer la derrota y sale, parece que definitivamente, de la crisis de juego en que ha estado sumido durante esta primera fase de la temporada.

Yago Iglesias volvió a confiar en su defensa de cinco, y consiguió mantener la portería a cero por tercera jornada consecutiva, y además logró marcarle tres goles a uno de los equipos con mejor defensa de la categoría.

El Guijuelo realizó un planteamiento muy defensivo, aunque dispuso de varias oportunidades para haberse adelantado en el marcador durante la primera parte. De todas formas, los rojiblancos fueron los que llevaron la iniciativa en la creación de juego y en las oportunidades con un Manu Viana brillantísimo que no sólo protagonizó varias acciones de peligro sino que asistió continuamente a sus compañeros.

El Guijuelo se plantó en el Ruta de la Plata con muchas precauciones y la templanza que le dan los buenos resultados que está cosechando esta temporada, los de Mario Sánchez se pertrecharon bien atrás con su defensa de cuatro, y un Willy haciendo una importante labor de contención en la franja ancha del campo. Y fue el Zamora el que optó por tener el balón, intentando progresar por las bandas, sobre todo con un Viana que estuvo muy activo durante toda la primera parte y que no tuvo el premio del gol por verdadera mala suerte. 

La primera ocasión no llegó hasta el minuto 4 cuando Silva recogió el rechace del portero Johan pero su remate se fue fuera. Pronto replicó el Guijuelo con un avance de Montero por la izquierda que centró para que Carmona disparase a la escuadra aunque el balón no quiso entrar.

El Zamora replicó con una jugada calcada a la anterior, con Silva esta vez por la derecha y el remate de Viana se iba a las nubes. 

El equipo chacinero no dudaba en subir a crear peligro aunque sin arriesgar, y de nuevo Montero en combinación con Carmona estuvieron a punto de adelantar en el marcador al Guijuelo pero esta vez no apareció el necesario rematador.

Pese a todo, el Zamora se mostraba sólido atrás con esa defensa de cinco que ha encontrado Yago Iglesias y que le está dando buenos resultados. El Zamora demostró ayer ante un rival muy ofensivo que tiene capacidad para realizar una defensa sólida, esa defensa que parece haber encontrado y que le permite mantenerse imbatido en los tres últimos partidos.

Viana era el hombre a vigilar en el Zamora pero nadie era capaz de frenarle y de sus botas surgió el medido centro que permitió a Altube rematar de cabeza ligeramente alto; poco después de la media hora de juego fue Alex Ares el que se internó entre la defensa del Guijuelo y su lanzamiento en parábola se fue envenenando pero no llegó a entrar de milagro.

El Guijuelo lo pasaba mal porque no era capaz de frenar a Viana que tuvo dos nuevas ocasiones, en la primera se internó por la izquierda y su disparo se estrelló en el poste, y en la segunda se escapó a la contra en solitario, disparó desde lejos y el balón se le fue muy alto.

El Zamora creaba mucho peligro y el Guijuelo no sabía como frenarlo, como no pudo evitar el remate de cabeza de Luismi que no encontró puerta por muy poco con el tiempo de la primera mitad ya agotado.

La segunda parte comenzó en el mismo tono y con el mismo desacierto del Zamora, en un centro templado de Dani Hernández al que no fueron capaces de llegar tres de sus compañeros. Y todavía fue más espectacular una acción dentro del área de Viana, cómo no, cuyo pase remató Altube de espuela pero de forma increíble, el balón se fue fuera. Las ocasiones del Zamora se seguían sucediendo y una muy clara la protagonizó Altube robando el balón y cediéndole a Prada que elevó el balón ante el portero pero se le fue ligeramente alto.

El partido se quedó un poco frío en la recta final porque ninguno de los dos equipos quería arriesgar y poder perder el partido.

El Guijuelo se plantó muy bien colocado en su campo, y el Zamora no paraba de mover el balón en una y otra dirección pero sin la facilidad anterior para encontrar espacios por las bandas. Pero los rojiblancos tuvieron más fe en la victoria que sus rivales y encontraron el camino en los ocho minutos finales en los que llegó el acierto y la goleada.

Fueron unos últimos minutos de vértigo en los que llegaron los tres goles obra de Pana, Ribeiro y Ander, que pusieron el 3-0 para llegar al parón en el mejor momento y fuera de descenso.