El intenso empate ante el Alzira (2-2) del pasado fin de semana debe convertirse en el punto de partida para volver a disfrutar del mejor Atlético Benavente Caja Rural. Los blanquiazules vuelven esta tarde-noche a la pista (20.30 horas) y lo hacen en casa del Agrupación Deportiva Sala 10 de Zaragoza, que ahora mismo se sitúa décimo primero en la clasificación con dos puntos más que los de Chema Sánchez, pero que será complicado y es que se trata de un recién descendido de Primera con jugadores de alto nivel donde, además, hay un jugador natural de la provincia de Zamora. Richi Felipe, de Santa Eulalia del Río Negro, se medirá a una plantilla y a un club que conoce a la perfección, y que, además, le ha tentado en más de una ocasión para unirse a las filas del Atlético Benavente, aunque por ahora son rivales en la cancha.

Con estas premisas, en el conjunto benaventano saben bien el fútbol sala que deben imponer ante su contrincante maño, un juego intenso y vertical con el que presionar a sus oponentes sin descuidar, eso sí, la faceta defensiva, y es que los partidos lejos de La Rosaleda siguen siendo una asignatura pendiente para ellos, y quieren que por fin ese maleficio se rompa. “El último partido en casa nos tiene que servir para saber cómo tenemos que hacer las cosas. Se compitió y tuvimos ocasiones para ganar”, indicó el portero benaventano, Dani Simón. El equipo viaja hoy hasta Zaragoza, aprovechando que el partido es a última hora. Además, siguiendo con la política de cantera, Chema Sánchez lleva con el primer equipo a cinco canteranos: tres juveniles y dos jugadores del filial.