La victoria ante el colista del pasado domingo (0-1) ha supuesto un chute de confianza en la plantilla del Zamora CF y un espaldarazo para el entrenador, Yago Iglesias, cuya continuidad hace una semana estaba en el aire, aunque es evidente que el gallego continúa en el punto de mira a la espera de que los resultados positivos se alarguen durante las próximas semanas.
Por ello, en vestuario y cuerpo técnico saben que queda mucho, mucho, por hacer y es que con seis jornadas disputadas están muy lejos de su objetivo de ascenso directo. Ahora mismo, los de la capital del Duero ocupan puestos de descenso directo a Tercera RFEF y tienen la imperiosa necesidad de mejorar en las dos áreas donde han mostrado grandes debilidades en cada partido, incluidos en los dos en los que se consiguió la victoria y es que a pesar de ganar estuvieron lejos de la imagen que se espera de ellos y de la que ofrecieron en la pretemporada.
CONCESIONES EN DEFENSA
En un primer lugar están las numerosas concesiones en defensa que han salido muy caras a los de Iglesias. Prueba de ello es que en los seis partidos disputados han encajado diez goles, y solo han conseguido mantener la portería a cero en su enfrentamiento con el Burgos Promesas, una falta de contundencia que ha salido muy cara. Las variaciones en primera línea han sido una constante desde que comenzó el “campeonato casero”, ya sea por obligación por las lesiones como la de larga duración de Javi Barrio, o por decisión técnica. Con estos mismos diez goles en contra se encuentra el Burgos Promesas, que además tiene un coeficiente de -8, mientras que el de los zamoranos es de -6, y muy mejorable. También tienen diez en contra, aunque están en la zona media, la Gimnástica y el Vetusta.
PÓLVORA MOJADA
Tampoco son mejores los datos en área contraria y es que el equipo lleva solo cuatro goles a favor, y tres de ellos fueron ante el Rayo Cantabria, siendo el cuarto y último en Castañares. Así, queda patente que los de Yago Iglesias no vieron portería contraria en cuatro encuentros, un bagaje muy pobre para una plantilla que sueña con ser campeona de grupo. Solo empeoran esta cifra, que también tienen Guijuelo y Coruxo (ambos en la zona alta) el Burgos B y el Cristo Atlético.
El resto de participantes del grupo del Zamora CF mejoran sus datos en ataque y es algo en lo que deben insistir los del Ruta de la Plata puesto que ya demostraron en verano que tienen pólvora, aunque necesitan sacarla sobre todo en los partidos en el Ruta de la Plata. Como tercera asignatura pendiente está la importancia de hacerse fuertes en casa y reconciliarse con una afición desilusionada con el mal arranque en el curso deportivo.
RESURGIR
El siguiente paso del resurgir rojiblanco lo deben dar este domingo cuando reciban al Ourense, equipo que llega en progresión tras enlazar tres jornadas sumando con dos empates y un triunfo. Concienciados en su objetivo, el Zamora está rubricando una buena semana de trabajo conscientes todos de que para cumplir con sus retos del año no puede volver a tropezar y es que, aunque todavía sea octubre, hay plantillas que empiezan a abrir brecha y mostrar credenciales.
