El ciclista español Alejandro Valverde reconoció una mezcla de sensaciones después de la última prueba de su carrera, que terminó con un sexto puesto en el Giro de Lombardía, con "ilusión", "tristeza" y "felicidad" tras más de 20 años en la élite.

"Ilusión por el futuro; tristeza, por despedirme de esta manera con el gran nivel que tengo, pero muy contento. Dar la enhorabuena al equipo por el gran trabajo que ha hecho. Ha ganado Pogacar pero ha hecho segundo Enric y está muy bien", dijo a los medios.

El murciano puso fin a su carrera este sábado con la alegría de una larga aventura que tendrán que buscar ahora los jóvenes que vienen apretando. "Siento alegría de haber hecho 21 años de profesional, haber disfrutado mucho, conseguir grandes cosas", apuntó un Valverde con 133 victorias.

El campeón del mundo en 2018, campeón de la Vuelta también en 2009 y podio tanto en el Tour como en el Giro de Italia, se retiró entre los mejores como era su deseo. "Damos paso a los jóvenes, que lo disfruten también", apuntó.

Además, Valverde reconoció, de la manera más sencilla, que piensa ahora aprovechar su vida a su manera, sin la exigencia del deporte profesional. "Lo primero que voy a hacer es tomarme un helado, con la familia que la tengo por aquí, hay que disfrutar", terminó, agradeciendo el cariño a todos los aficionados.

"Se acaba una etapa que me ha dado todo y de la que he disfrutado desde el primer día hasta el último hoy en Italia. Gracias a los que me habéis acompañado en este camino y a los que me habéis transmitido vuestro apoyo y cariño. ¡Viva el ciclismo!", escribió después en su cuenta de Twitter.