Por fin. La Copa RFEF como tabla de salvación, a la vez que el sueño de la Copa del Rey sigue más vivo que nunca después de una victoria muy meritoria y en inferioridad del Zamora. Dos dianas de Altube en el segundo periodo permitieron a los de Yago Iglesias voltear un peligroso 1-0 en contra al descanso, aunque los locales forzaron la prórroga casi en el último minuto de encuentro con un golazo de Garrido, misil desde la larga distancia. Pero el Zamora, jugando con uno menos en la última media hora por dos amarillas a Luismi Luengo, no se echó atrás y fue valiente, forzando un penalti a los ocho minutos de la prórroga que el capi Dani Hernández convertía en el gol clave. Agónico final, diez contra diez, pero un estallido de júbilo comprensible con el pitido final para un Zamora que ahuyenta fantasmas y crisis con un triunfo vital. En todos los aspectos.

Un avance del equipo zamorano que estrenó ayer equipación pistacho | | ÁREA 11

Llegaba la hora de los menos habituales para tratar de revertir la espantosa dinámica de la última semana, con un rival enfrente en parecida situación liguera y también dejando fuera a los elementos más usados en el torneo de la regularidad. Cinco novedades en el conjunto galaico respecto al de la última jornada.

Un avance de Alex Ares. | | ÁREA 11

Dos referencias arriba como Pana e Iban Ribeiro en el once inicial de Yago Iglesias, que se veía superado en el tramo inicial por un Bergan dominador y dueño de la pelota. Dos ocasiones claras para los locales antes del minuto diez, las dos en las botas de Carlos López. Muy activo el mediapunta de los de Carballo, pero sin puntería.

La primera del Zamora a punto estuvo de suponer el cero a uno, cuando en un error de entendimiento entre la defensa rojilla y el meta Santi Canedo, Ander El Haddadi enviaba finalmente el esférico al lateral de la red. Una clara opción para los de Yago Iglesias, que querían dar un paso adelante tras ese arranque dubitativo.

El encuentro se iba equilibrando en la medular, con las defensas muy sólidas y sin dejar maniobrar a los jugadores con peligro, así que los minutos pasaban entre los intentos de unos y otros muriendo sin remedio en la seriedad de las dos zagas y en los errores en el pase de unos y otros.

Juanan trataba de llevar la manija del conjunto de Yago Iglesias en el centro del terreno, donde Brunet se convertía en su sombra, pero de nuevo el Bergantiños iba cogiendo los mandos del partido, con posesiones más largas hasta que en una jugada de estrategia llegó el primer gol. Un centro desde la esquina de Carlos Pérez encontraba el testarazo perfecto del ´Chapu´ Brunet al fondo de las mallas. Tocaba, ya no es noticia, remar contra un marcador adverso tras un error atrás, ya que el jugador rojillo remató con los dos pies firmes en el suelo, sin necesidad de saltar.

Reaccionaron bien los zamoranos, pisando más el campo del Bergantiños y con una clara oportunidad para Álex Ares a cuatro minutos del 45 que se marchaba desviada por muy poco, la mejor oportunidad del Zamora en un primer periodo que acababa con el uno a cero en todo lo alto a favor del conjunto de José Luis Lemos.

Quería salir a por todas el Zamora en el segundo periodo pero el control del encuentro seguía en manos de un Bergantiños muy bien plantado. Remeseiro había entrado por Palomares, al que le habían hecho sufrir en exceso los exteriores rojiblancos, si bien en As Eiroas el Zamora vestía un llamativo uniforme fosforito.

Yago Iglesias metió un triple cambio que redecoró el encuentro por completo, ya que apenas un minuto después el centro de Dani Hernández por el perfil derecho del ataque lo remataba Álex Altube al fondo de las mallas. Dos recién entrados fabricban esperanza, pero apenas un par de minutos más tarde Luismi veía su segunda tarjeta amarilla, dejando el ex del Zaragoza B al Zamora con un hombre menos.

Pero tras unos minutos donde el equipo se replegó, quitando ipso facto el técnico a Ander El Haddadi -una pena, porque llevó peligro por el costado- para rehacer la zaga con Javi Duro en el césped, se veía al Zamora jugando con confianza y saliendo con velocidad ante un Bergantiños muy impreciso.

Hasta que otra jugada en velocidad de los zamoranos por la banda encontraba en el centro al área el remate preciso de Álex Altube para voltear el marcador. Restaban apenas diez minutos para el noventa y el equipo, jugando en inferioridad numérica, conseguía lo más complicado.

En esos minutos finales, sufrimiento para los de Yago Iglesias ante un rival que movía sus piezas y se lanzaba al ataque pero de manera muy desordenada. Muchos balones en largo sobre el área del joven cancerbero Troya, hasta que en el tercer minuto de añadido llegaba el mazazo en un disparo lejano de Iván Garrido que se colaba como una exhalación en el portal visitante, ante la locura de toda la chiquillería concentrada tras la portería de Troya. El equipo ya paladeaba la victoria a domicilio, una verdadera pena, y el encuentro se marchaba al tiempo extra de la prórroga.

En ese suplemento, el Bergantiños trataba de construir juego desde atrás con paciencia, ante la receta de salidas veloces de un Zamora que volvía a obtener premio a los ocho minutos con un claro penalti que convertía Dani Hernández. Su chut raso a la derecha del arquero a punto estaba de sacarlo Santi Canedo, y los de Yago Iglesias se volvían a poner con ventaja. Poco después se le anulaba un tanto al gallego Boedo ante el enfado de la grada, y en la segunda mitad los nervios derivaron en un carrusel de protestas y expulsiones, acabando el encuentro diez contra diez y con una defensa del Zamora que valió una victoria vital.