El BM Zamora Enamora disputa hoy su primer partido liguero de la temporada en casa y lo hará a partir de las 18.00 horas en el Manuel Camba, escenario que llevaba años sin pisar en competición regular y al que acude necesitado de una victoria con la que dejar atrás su pésimo debut en la competición. Un estreno liguero en División de Honor Plata en el que encajó una sonrojante victoria y que le sitúa como colista antes de la disputa de la segunda jornada, en la que está obligado a reaccionar frente al recién ascendido Base Oviedo.

La pretemporada pistacho no auguraba el batacazo que los pupilos de Iván López sufrieron en pista del Amenabar Zarautz. Un golpe tan duro que, en los días previos, llevó al vestuario zamorano a pedir perdón a aficionados y socios por una actuación que se explica por sí sola atendiendo al marcador de aquel partido: 43-26.

Para que el perdón sea completo, en el BM Zamora Enamora se debe manifestar hoy con un acto de contrición. Es decir, ha de saltar a la pista dispuesto a sumar los dos puntos y dejar claro que, ese primer día, no se asemeja para nada a la realidad del equipo y su futuro en la segunda categoría nacional.

Con ese ánimo ha entrenado el cuadro de Viriato esta semana, siendo consciente también que no le será nada fácil cerrar capítulo pues, en frente, estará un Base Oviedo que acude a Zamora con sensaciones totalmente opuestas y un plantel muy sólido.

Los asturianos, dirigidos por el expistacho Ricardo Margareto y con Sarasola en sus filas, han sido uno de los bloques que más se han reforzado este verano. Fichajes que, además, cuentan con nombre dentro del panorama nacional, habiendo jugadores con reciente pasado en la Asobal que completan el ya peligroso grupo que logró el ascenso desde Primera Nacional el pasado curso.

Un enemigo físico, combativo y no exento de calidad cuyo principal propósito será imponer su ley y sumar así otros dos puntos a los que cosechó en Vallobín ante el BM Ikasa (26-23). Un adversario al que el BM Zamora Enamora espera frenar dando un notable paso adelante en sus prestaciones defensivas, como ya señaló en las horas previas Iván López, argumentando que su equipo es otro cuando cumple en esas tareas.

Para defender y buscar transiciones rápidas con los que sorprender a la zaga oventense y su envergadura, el BM Zamora Enamora tendrá hoy disponible a todos sus hombres salvo Nacho López, Marco Torres y Joaco Aravena, siendo duda hasta última hora el concurso de Fer. Bajas que los pistacho esperan suplir con el apoyo de la grada, factor que podría ser clave para dejar atrás el primer revés del curso.

López: “Si defendemos bien somos un equipo difícil de batir”

Iván López, técnico del BM Zamora Enamora, señaló antes del encuentro su deseo por “demostrarse en la pista” todo lo que “ha escocido” el mal inicio de liga, un tropiezo que bajo su punto de vista es “mejor que haya pasado cuanto antes” para “poder mirar hacia delante y que sirva como punto de inflexión”.

“He visto otras actitudes y caras, esperemos que se demuestre en la pista”, destacó el andaluz, señalando que será necesario un cambio para superar a un Base Oviedo que tiene “jugadores físicos, con talla y peso” y es “un equipo de nivel de Plata y que presentará batalla”. Un adversario que obligará a los suyos a “estar muy bien en todas las fases del juego” para sumar dos puntos.

López destacó que, la mejoría, debería centrarse principalmente en defensa pues, “cuando ayudamos a la portería en esa parcela” el BM Zamora Enamora es “un equipo difícil de superar”. “Tenemos que empezar a elaborar nuestro juego desde ahí, es muy evidente que nuestras opciones de ganar aumentan de manera exponencial si defendemos bien”, analizó, asegurando que el cambio de pabellón “no altera el plan de partido” de los pistacho, aunque sí espera que “el Camba sea una olla a presión” que impulse a sus jugadores hacia la victoria.