¿Y el calendario, cuándo? Desde hace días, más bien semanas, miembros y aficionados de los clubes de 2ª RFEF acarrean con la pregunta por la calle física y virtual, mientras el destinatario de la misma, la Real Federación Español de Fútbol (RFEF), sigue en el punto de mira por la tardanza de la respuesta. En la pasada temporada, primera tras la polémica reestructuración, el calendario había sido publicado el 20 de julio.

Ya entrados en agosto, todo parece indicar que la demora es consecuencia de no haberse tramitado, en su totalidad, las inscripciones de los equipos en liza. El mismo día que finalizaba el plazo de inscripción, 18 de julio, suscitó cierta paradoja ver cómo el ente federativo literalmente anunciaba el «éxito completo en la inscripción de los equipos en las competiciones oficiales», a la vez que hacía saber lo siguiente: «para aquellos equipos que aún les falte presentar alguno de los requisitos obligatorios para validar la inscripción se otorga un plazo de diez días para presentar dicha documentación…».

Ese segundo plazo concluyó el pasado jueves, día 28, y la Federación procedió a la apertura de un tercero, por espacio de otros cinco días hábiles, que finalizará hoy, día 4, a tan solo un mes del inicio de la competición. La situación no parece la más apropiada para una categoría a la que se pretende dar aires de profesional.

Después de que el martes, por fin, fueran validadas las inscripciones del Real Murcia, en Primera RFEF, y Sant Andreu, Jaén, Santanyi y Murcia B, en Tercera RFEF (en esta categoría queda pendiente el Haro riojano), aún restan las de dos clubes de Segunda RFEF, el Lleida Esportiu, sumido en una crisis galopante, y el sustituto del Extremadura. Tras su desaparición, el club de Almendralejo deja una vacante que sigue sumida en el misterio.

En esa lista de los últimos equipos admitidos, dos llamaban especialmente la atención, y es que el Real Murcia y el Santanyi ya llevaban semanas integrados en sus calendarios, el de 1ª RFEF y el del grupo balear de 3ª RFEF, respectivamente, lo que, de alguna manera, también da muestras del reino de taifas en el que se ha convertido el fútbol español. Con la misma, y aún restando dos plazas por solventar, bien podía estar confeccionado el calendario de 2ª RFEF, pero, en este caso, a sus miles y miles de expectantes directos e indirectos no les queda otra que desgañitar, por no poder programarse, y esperar a que los responsables federativos hagan sus deberes. A ver hasta cuándo.