La Opinión de Zamora

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Balonmano | División de Honor Plata
Iván López Entrenador del BM Zamora Enamora

“Nunca pensamos que íbamos a descender”

“De cara al curso que viene hay que ser realistas pero sin renunciar a nada, el primer objetivo es alcanzar la permanencia cuanto antes”

Iván López, técnico del BM Zamora Enamora. José Luis Fernández

Iván López cerró con una sonrisa su primera temporada en el Balonmano Zamora. Una campaña dura, en la que el primer equipo tuvo que esforzarse para superar múltiples obstáculos y lograr la permanencia en División de Honor Plata. Una campaña que, con tiempo para la reflexión, el andaluz desgrana resaltando el desempeño de su equipo y su crecimiento de cara al próximo curso.

–¿Qué nota le pondría a esta temporada, su primera aquí?

–Poner una nota no sería adecuado porque la temporada se divide en dos fases y no son del todo independientes. Mi valoración es que podemos estar relativamente satisfechos porque, dadas las circunstancias, el objetivo se ha conseguido. A todos nos gustaría haber estado luchando por otras cosas, pero ya sabemos lo dura que es ahora la División de Honor Plata con su actual formato.

–Se soñaba con pelear por ascender y, al final, salvar la categoría supone todo un éxito. ¿Qué factores han influido para ello?

–Ha habido un poco de todo. Al inicio, el equipo cogió bien la ida de juego pero, si no recuerdo mal, en las primeras cinco jornadas se nos escaparon muchos puntos en las últimas acciones. Si esos goles que nos metían en los últimos minutos los hubiéramos anotado nosotros, hubiéramos ganado de uno en vez de perder de uno y el devenir del grupo, creo, hubiera sido distinto. No podemos jugar a ser adivinos pero se compitió en todos esos encuentros y, con diez puntos en cinco jornadas, la película sería otra. Esa mala gestión de los últimos minutos nos lastró. Sin embargo, fue parte del aprendizaje y es algo que hicimos bien en el tramo final de la temporada.

–Esos resultados hacían pensar que el equipo estaba bien armado y podía dar más. ¿Qué le faltó al grupo para dar el paso adelante que dio en la segunda fase del campeonato?

–Nuestro equipo es un conjunto joven con calidad en muchos puestos. Esa juventud te da frescura y un juego diferente al que pueden hacer todos los demás, pero también inexperiencia. Además, la plantilla tenía muchas virtudes pero también, en ciertos momentos, estaba algo desequilibrada en puestos específicos, al menos bajo mi punto de vista. También las lesiones pasaron mucha factura y el equipo tardó en adaptarse a esa realidad que nos siguió golpeando.

López, al frente del cuerpo técnico tras un partido de la escuadra pistacho. JOSE LUIS FERNANDEZ

–¿Han sido decisivas las lesiones esta temporada?

–Sin duda. Las lesiones han marcado mucho el camino porque nos obligaron a estar constantemente reinventándonos. Sin ir más lejos, en las primera jornada perdimos a Joaco (Aravena) que, para mí, en ese momento, era el jugador clave de la plantilla. Después, con el paso del tiempo, seguimos perdiendo otros jugadores que también estaban llamados a ser importantes y no por poco tiempo, coincidiendo incluso varias bajas a la vez. Las lesiones de Nacho, Jortos... han convertido el curso en un constante ejercicio de adaptación. Un lastre que influye en el rendimiento, afecta al día a día y al ánimo del vestuario. Para mí, como entrenador, ha sido todo un reto.

–Con tanta lesión, derrotas y cayendo al grupo de descenso... ¿En algún momento pensó “esto no se puede sacar”?

–Nunca pensamos que íbamos a descender, pero sí que iba a ser muy difícil salvarse. Al final, había muchos equipos de gran entidad en el grupo por la permanencia y mucha igualdad. Sabíamos que iba a ser cuestión de detalles, pero de verdad, no porque fuera un tópico. Si el día de BM Alarcos no metemos el último gol y defendemos la última acción, por poner un ejemplo, hubiéramos ido a Córdoba a jugarnos el todo por el todo y eso era un escenario indeseable y un riesgo enorme. El punto frente a Sarriá o las victorias fuera de casa, que han sido vitales... Estaba difícil porque estábamos varios equipos en la pelea y cualquiera podía pinchar, pero el trabajo del grupo tuvo su recompensa.

–¿De ahí que haya satisfacción por la permanencia?

–Hay que darle valor a lo que ha hecho el equipo. No se ha descompuesto y ha dado la cara. Ha sacado los partidos y no solo con corazón o garra. Ha habido momentos de buen juego y de saber competir. Es algo que se debe destacar.

–¿Cuál ha sido el mejor momento de la temporada? ¿Y el peor?

–Hemos tenido momentos muy buenos y bonitos, como el partido en casa frente a Sant Quirtze con el homenaje a Quintana, el día ante BM Alarcos o frente a Soria... Han sido días emocionantes, con buen balonmano unido a victorias, días especiales. Sin embargo, yo me quedaría con el camino en sí; con el hecho de haber sabido aprovechar cada oportunidad y adversidad para crecer como equipo. En cuanto a los peores momentos, esos han sido cada lesión. Especialmente las de rodilla, que fueron instantes muy duros. Para mí, lo peor del año pues también he sido operado de esa articulación y sé lo que hay. Esa losa y el fantasma de volver a perder por un gol hicieron esta temporada muy dura.

–El camino recorrido ha llevado a su grupo a crecer. Con varias renovaciones cerradas, ¿Cómo ve el futuro del equipo?

–Siento que hemos acabado con un poso importante. La idea que tenemos es la de mantener el bloque lo máximo posible y se está cumpliendo. Después, equilibrar determinadas posiciones. Aun así, la liga repite estructura con dos grupos de nueve equipos, y eso nos obliga a poner los pies en el suelo. Debemos ser conscientes de nuestro presupuesto y saber que habrá plantillas más potentes. Nuestra intención es conectar con nuestro modelo y señas de identidad, dar continuidad al trabajo y ser lo más competitivos posible. Alcanzar cuanto antes la permanencia para, después, poder pensar en otras cosas. Ser realistas sin renunciar a nada.

–Dentro de esas señas de identidad que menciona está el perfil zamorano del plantel, ser la cima de un club de base. ¿Cómo se presenta el futuro para la cantera y qué peso tendrá en el equipo?

–El ímpetu de todos en el club, y mío como director técnico, es crecer por abajo. Vamos a intentar, dentro de nuestras posibilidades, hacer una apuesta importante por mejorar la cantera. Creo que tenemos buenos mimbres, hay un volumen brutal de jugadores y muchos cuentan con talento, pero hace falta darle calidad al trabajo con la base. Queremos que los equipos sea más competitivos y que, a corto y medio plazo, haya más zamoranos en el primer equipo. Igual que en la sección femenina, donde también hay calidad y se debe recobrar la competitividad de antaño. Eso hará que los primeros equipos mejoren sus prestaciones.

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