Vigo Gorrochategui nunca había visitado Zamora y está encantada de poder hacerlo con el rugby como motivo. La riojana disfruta cada uno de sus días en la élite, donde para ella el factor humano es determinante.

–¿Qué significa para usted y su deporte formar parte de esta iniciativa?

–Es una oportunidad muy grande. Para nuestro deporte, además, es una manera de acercarte a una ciudad más pequeña con un rugby más amateur para ayudarles a ser más grandes.

–¿Ha crecido mucho el rugby femenino en los últimos años?

–Muchísimo. Se ve en las universidades; allí se crean muchos grupos y, de ahí, la gente quiere más. En las escuelas, es increíble el número de niñas que ahora quieren jugar al rugby.

–¿Qué papel juega Iberdrola en todo ello?

–Los patrocinadores son muy importantes porque el deporte gana muchísimo impulso y se pueden hacer más cosas. Iberdrola, desde el primer momento, está muy cerca nuestro. Lleva ya muchos años con nosotras y crea muchos eventos. Se agradece tanto esfuerzo y, estoy segura que sin un patrocinador como ese, el rugby femenino no estaría donde se encuentra ahora.

– ¿Qué futuro ve para el rugby femenino?

–El futuro es realmente prometedor. Este deporte evoluciona a pasos agigantados y espero que nos permita tocar pronto las estrellas.

–¿Qué espera del partido de mañana?

–Será intenso y duro pero muy bonito. Al final, estás jugando con personas distintas y supone una experiencia que no tendrás en tu equipo. Es ilusionante.