El BM Zamora Enamora sumó dos puntos clave en su búsqueda por la permanencia al ganar ayer al Vestas BM Alarcos, rival directo en esa lucha, por un ajustado 26-25 en una nueva remontada de los pistacho. Una revolución cimentada en las señas de identidad del conjunto de Viriato: el poder del colectivo y una inagotable entrega.
El partido era determinante en la lucha por la permanencia como quedó claro desde el inicio. Unos primeros compases en los que nadie quería perder y la atención estaba puesta en las defensas, con Mendieta y Torres retrasando el primer tanto de la contienda durante dos minutos.
El 0-1, una carambola, encontró rápida respuesta, también con algo de fortuna, desde los siete metros gracias a Cubillas. Ambos equipos empezaban a entonarse y a mostrar las armas con las que acudían a la crucial batalla. Tan determinante que, en un exceso de ímpetu, Souto fue descalificado a los cuatro minutos de juego en una acción desmedida sobre el local Diego Pérez. Lance que permitió al cuadro pistacho tomar ventaja y su primera superioridad, si bien no acabó por ser tan determinante como parecía.
Vestas BM Alarcos no se echó atrás y, pese a un tanto de Jortos, la primera línea manchega no tardó en agujerear el marco local. Al volver todos a pista, el marcador ya estaba en contra de un BM Zamora Enamora ante su primera situación complicada del envite (3-4, m. 8).
Los zamoranos encontraron revulsivo al problema en la dirección de Bellia y el talento de Jaime, firmando un parcial de 3-0. Pero, en un guion con alternativas, un par de fallos en ataque volvieron a igualar la contienda (7-7) justo antes de que los zamoranos sufrieran su primera exclusión.
Esta vez, el equipo en superioridad aprovechó la ocasión. Pese a la entrada de Maide, Guille y Moreno o los dos minutos señalados al visitante Ramos,Vestas BM Alarcos lideraba el tanteo y, con una exclusión sobre Jaime, empezaba a romper el partido forzando el tiempo muerto de Iván López (7-9, m. 16).
El receso no puso fin al buen momento manchego. El BM Zamora Enamora trató entonces de no perder la estela de su rival y apeló a Mach para ello. El meta, con dos paradas, permitió que Horcajada ajustara el tanteo. Un paso hacia delante al que siguió otro hacia atrás, con gol de Cordes y sanción para Diego Pérez. Pintaba feo para los pistacho pero, en esta ocasión, los minutos previos al descanso fueron suyos. Vestas BM Alarcos estiró su renta hasta los cuatro tantos gracias a las intervenciones de Torres pero, justo antes del intermedio, una vaselina de Illesca y dos grandes goles de Maide dejaban la contienda muy abierta de cara a la reanudación (12-14).
Dispuesto a plantar batalla y pelear hasta el final por los dos puntos, el BM Zamora Enamora arrancó de forma eléctrica la segunda mitad. En apenas un minuto, Maide igualaba el encuentro y devolvía la ilusión a la grada.
El chispazo inicial pareció no tener continuidad, con BM Alarcos retomando los dos goles de renta, pero Maga y Jortos volvían a igualar la contienda (16-16).
Con el partido en un puño, llegó un desafortunado lance. Mach recibió un impacto en la cara en una acción castigada, además, con siete metros. Una acción que dio aire a Vestas BM Alarcos, que no tardó en volver a irse en el marcador gracias a su expeditiva defensa. Los zamoranos respondieron pero Palacios, Cordiés y Serrano volvieron ap oner tierra de por medio con un 17-20 que forzó a Iván López a pedir tiempo muerto.
El parón tuvo buen efecto sobre el cuadro de Viriato, a pesar de que los tres goles de desventaja se mantuvieron durante varios minutos. Sin embargo, la vuelta de Mach (aún con la cara afectada) y el empuje pistacho encarnado en su capitán Guille. Vestas BM Alarcos pidió tiempo muerto porque el choque ya era otro con 20-21 como tanteo.
El BM Zamora Enamora amenazaba con una nueva remontada pero los manchegos se fueron otra vez a tres tantos. Un duro golpe del que los locales se levantaron con las paradas de Mach y la dirección de un Andrés Pérez sobresaliente en la recta final del envite.
El visitante Torres trató de retrasar con sus intervenciones lo que parecía inevitable porque Jortos, con un golazo, abrió las puertas de la victoria a diez minutos del final dando inicio a un 23-23 fruto de una combinación entre Andrés y Guille y un gran tanto de Horcajada, clave también en los siguientes compases.
Mach siguió con su colosal actuación deteniendo un siete metros y, pese a un nuevo tanto visitante, Andrés igualaba de nuevo la contienda para, después, forzar una clara exclusión visitante en un intento de “fly” con Jaime.
El extremo falló desde los siete metros y, con 24-24, los manchegos volvieron a golpear. Pero fue un error aislado en una defensa zamorana para enmarcar en el tramo final. Una zaga que, con un robo de Fernando, empataba a menos de dos minutos para el final haciendo que la grada, siempre animosa, se desgañitara para sumar en defensa.
El esfuerzo, otras veces sin premio, tuvo su recompensa. Y es que, aunque Jortos falló un tiro asequible, Bellia metió una mano prodigiosa para lanzar un contragolpe mortal de Horcajada, haciendo el 26-25 que los pistacho defendieron con uñas y dientes para terminar celebrando una victoria que supone, a día de hoy, más que dos puntos.
