Yago Iglesias, entrenador del Zamora CF, reconoció este jueves que la lesión de rodilla del delantero Dieguito reviste un carácter grave pese a que todavía no se dispone de un diagnóstico médico. El equipo realizó ayer un entrenamiento liviano tras el partido de Copa pero ya está preparando el partido contra el Valladolid B que se celebrará en el estadio de Zorrilla y no en el anexo como es habitual en los encuentros del filial blanquivioleta. Iglesias resaltó que los filiales tienen una clara ventaja respecto a otros clubes por la calidad de los jugadores que pueden tener: “El Valladolid B es el equipo más joven de la categoría, tiene la práctica totalidad de su plantilla menor de 23 años, excepto dos jugadores, tiene muchísima calidad y como filial de un equipo profesional tiene acceso a jugadores que otros clubes de nuestra categoría no pueden conseguir”, explicó el técnico gallego para añadir que “es sabido que los filiales también tienen altibajos en su rendimiento. Habitualmente su rendimiento es de picos de sierra, son capaces de lo mejor y de lo peor. El Valladolid fue capaz de ganar en el último partido en casa al segundo clasificado y además por goleada, y la semana pasada fueron a Riazor y el resultado fue el mismo pero al revés. Siempre tienes la incógnita de la versión con la que te vas a encontrar pero nosotros tenemos que estar preparados para su mejor versión. A partir de ahí tenemos que tener claro cuáles son nuestras ideas para intentar contrarrestar sus virtudes e imponer nuestro plan de partido”. El entrenador del Zamora no piensa en otra cosa que no sea la victoria el domingo. “Tenemos que ser un equipo valiente, que salga a por los tres puntos en todos los campos a los que vaya aunque luego haya planes de partido. Tenemos que buscar la portería rival, llevar la iniciativa en el juego aunque haya momentos en que no va a poder ser así, y más ante un rival de entidad”.

Yago Iglesias también quiso remarcar que “tenemos que ser conscientes de lo que nos está pasando, de los errores que estamos cometiendo. Poco a poco trabajamos en la mejora de los comportamientos individuales y colectivos en el campo. Ajustar lo que tenga que ver con pases, con distancias, con intenciones y en el cómputo total, llegaremos a no cometer esos errores. El fútbol es un continuo, una acción sin importancia puede tener una consecuencia positiva o negativa aunque es uno de los aspectos más difíciles de controlar. En el fútbol pasan cosas continuamente y lo que hago en una acción tiene su continuación en otra. Y la mejor medicina será sumar la primera victoria, entonces el equipo adquirirá confianza”, añadió el entrenador coruñés.