Un saque a la esquina, a más de 200 km/h, sin respuesta posible. El 14 'ace' del partido le dio a Feliciano López la victoria ante el ruso Andrei Rublev por 2-6, 6-3 y 6-4. Un punto de oro para España en su posibilidad de acceder a los cuartos de final de la Copa Davis y seguir defendiendo el título ganado en 2019. El veterano tenista toledano, elegido por Sergi Bruguera, para buscar el milagro ante el poderoso equipo ruso, le dio las opciones que no eran fáciles después de que el equipo español perdiese en el camino a Rafael Nadal, Roberto Bautista y a 24 horas de empezar el torneo a Carlos Alcaraz.

No empezó bien el primer set apenas. En apenas 27 minutos Rublev parecía dispuesto a demostrar la superioridad de ránking y edad ante Feliciano López, (106 mundial y 40 años), al que había ganado en única vez que habían jugado en el Abierto de Australia de este año. El ruso, número 5 mundial y de 24 años tomó el mando rompiendo el saque de Feliciano López de salida para hacer un segundo 'break' (4-1) y acabar cediendo solo dos juegos. El tenista ruso ha dominado con su poderosa derecha y su efectividad en el resto. Feliciano López no encontraba el el saque su mejor defensa (50% de efectividad, solo 4 'aces' y e dobles faltas).

Feliciano López prepara el saque. EFE

Cambio de escenario

La situación dio un vuelco en los dos siguientes sets. Sergi Bruguera le pedía a Feliciano que fuera más valiente, más agresivo y que se lanzara hacia la red. Feliciano le hizo caso. Se la jugó más con su saque y buscó la red para cerrar los puntos y el premio llegó con la primera rotura a Rublev (4-2). Una ventaja que Feliciano López defendió con uñas y dientes en su siguiente saque en el que salvó hasta tres 'break points' para desesperación del tenista ruso que no pudo evitar ceder el segundo set en un Madrid Arena que era una olla a presión, con 9.000 aficionados animando y creyendo en un milagro más que se dan en la Copa Davis, donde el ránking no es un seguro.

Y eso se confirmó el tercer y definitivo set. A Rublev se le volvió a escapar la posibilidad de comenzar 2-0 al perder dos 'break points', como le había pasado en el segundos set. La situación le desestabilizó y la ansiedad le hizo perder su saque en el siguiente juego (2-1) para volver a ir a remolque de un Feliciano, inspiradísimo y valiente que cada vez creía más en sus opciones.

Y así mantuvo esa ventaja hasta el final, a pesar de dejar escapar dos 'match balls' con 5-3. No solo eso. En el que sería el último saque salvó un 30-40 y certificó el triunfo con ese último 'ace' para la épica de una victoria que ponía a España con ventaja en la eliminatoria ante el segundo partido que enfrenta a Pablo Carreño y Daniil Medvedev.