El Zamora Rugby Club salió derrotado por un ajustadísimo 29-27 en su cuarto partido de liga contra el Rugby Ávila Club (RAC) disputado en el campo de la Ciudad Deportiva de Ávila.

Durante la semana se produjeron numerosas bajas en el XV del Carnero por lo que se presentó en Ávila sólo con dos jugadores en el banquillo (Isma y Zama) que no llegarían a efectuarse. La alineación fue la siguiente: Socio, Drago, Randy, Pechu, Estévez, Albarrán, Cuñado, Tyson, Jorge, Polo, Franga, Isco, Mario, Sola y Melgui.

Desde el pitido inicial el Zamora Rugby Club metió en su propio campo al Rugby Ávila y el primer ensayo zamorano llegaría muy pronto -en el minuto 3- gracias a un "touch-maul" cercano a línea de 5 y fue Socio el encargado de posar el balón. Ensayo fue transformado por Mario para poner el 0-7 para el ZRC.

El partido siguió por los mismos derroteros, negándole los zamoranos el oval a Ávila y jugando continuamente en campo contrario. Mención especial merece el dominio en las fases estáticas por parte del ZRC, ganando balones propios y ajenos continuamente. La segunda marca para el "XV del Carnero" llegó un balón dividido en el medio del campo. Cuñado, tras varias patadas a seguir, y un favorable bote en la línea de marca, conseguía posar por segunda vez el oval en la zona de marca abulense. Fue un ensayo no transformado que dejaba un 0-12 para los Carneros en el minuto 21. 

Tras el ensayo, Rugby Ávila herido en su orgullo, empezó a equilibrar un poco más el partido, aunque fruto más de las infracciones cometidas por el ZRC que por méritos propios. Y así, el equipo local marcó su primer ensayo tras salida de un pilar del RAC en una "touch" en la línea de 5 zamorana al que nadie fue capaz de frenar. Minuto 32 y marcador 7-12 para ZRC, y así terminaría la primera parte.

En la segunda parte, el Zamora Rugby Club siguió cometiendo demasiadas infracciones que le daban aire al Rugby Ávila y en el minuto 7, los locales conseguían su segundo ensayo en el que la defensa zamorana no fue capaz de parar al mismo jugador que les endosó el primer ensayo. Tras una carrera por la línea de 22 zamorana, se zafó de cuantos carneros le salían al paso. El RAC le había dado la vuelta al marcador para dejarlo en 14-12. Y por si fuera poco, en el minuto 13, los locales golpeaban de nuevo tras ensayar en una salida de golpe de castigo a 5 metros, en el que nuevamente, la defensa zamorana no estuvo muy afortunada ( 21-12). Eran los peores momentos del Zamora Rugby Club que no conseguía atajar las indisciplinas y ser más tajantes a la hora de defender.

Pero los zamoranos no se vinieron abajo y, en el minuto 17, en una gran jugada de ataque de todo el equipo, un "tuya y mía" entre Cuñado y Mario, fue éste último el que lograba la tercera marca para los Carneros. Ensayo muy bonito de ejecución, y se apretaba el marcador en 21-17 para los locales y con más de media parte por jugar. A partir de este momento el partido se volvió loco con ambos equipos volcados al ataque por lo que los ensayos podían caer en un bando u otro, pero fue Ávila quien golpeó de nuevo en el minuto 25, tras pitar el árbitro una melé girada a los zamoranos cuya salida de golpe de castigo por parte de RAC fue resuelta de forma efectiva por sus delanteros. Minuto 25 y 26-17 para Ávila. En el minuto 28 el ZRC se acercó de nuevo en el marcador (26-20) al convertir Mario un golpe de castigo.

De aquí al final, el Zamora Rugby Club volvió a meter en su campo al RAC y en el minuto 38 conseguía darle la vuelta al casillero, tras pitar el árbitro un ensayo de castigo a favor de los zamoranos por anti juego de los abulenses. 26-27 y final de infarto que esperaba a ambas escuadras. El ZRC sólo debía esperar y recuperar el saque de centro y dormir el partido hasta su finalización. Pero en una serie de jugadas desgraciadas de los zamoranos a la hora de conservar el balón, un golpe de castigo a favor del Ávila sirvió para que transformaran y quedase el marcador en un definitivo 29-27 pues ésta fue la última jugada.

En resumen, partido épico donde los haya, en el que los carneros hicieron un derroche físico increíble (con jugadores 'tocados' que aguantaron como jabatos todo el encuentro) que no les fue suficiente para que la suerte los acompañara habiéndoselo merecido con creces durante todo el partido. Una pena porque fueron superiores en todas las fases estáticas y de conquista del oval y que se tiró por la borda por la gestión del oval en la última jugada.

El próximo partido tendrá lugar ya en Zamora contra El Salvador de Valladolid el día 20 de noviembre.