El fútbol base se recupera en la provincia de Zamora. En la pasada campaña, la pandemia asestó un duro golpe al fútbol modesto zamorano; sin embargo, en esta temporada 2021/2022, se comienza a ver la luz al final del túnel. Los números no mienten, la recuperación existe.

En la etapa 19/20, la justo anterior al estallido de la crisis sanitaria de COVID-19, la Federación de Fútbol de Castilla y León registró un total de 162 clubes en la provincia. La Primera División Provincial contó con doce equipos, la misma cifra se repitió en la categoría juvenil, mientras que en cadetes se registró uno más y en alevines fueron 28 (entre las dos divisiones). Esas fueron las primeras ligas de la pandemia, las que fueron paralizadas.

La 2020/2021 fue una temporada extraña, aunque la pelota volviera a rodar. Las ligas solo se retomaron en primavera y con una caída notable en las inscripciones, 97 clubes entre todas las competiciones zamoranas. Fue el año de las “Ligas Volvemos”: únicamente cinco clubes resistieron en Provincial, cuatro en juveniles, nueve en cadetes y quince en alevines. Un periodo marcado por los protocolos y las constantes circulares.

Pero el auténtico fútbol ha retornado en la actual 21/22. Desde la federación pronostican que se pueda alcanzar una cifra aproximada de 150 entidades inscritas: quince en Primera División Provincial de Aficionados (récord en los últimos años), ocho en juveniles, diez en cadetes y 25 en el total de la categoría alevín. Los pronósticos son de recuperación absoluta y las cifras actuales ya son similares a los resultados pre-pandemia. Zamora quiere volver a tocar el balón.