El Zamora CF se desgastó y mereció puntuar ante el Bilbao Athletic pero no fue posible y el equipo rojiblanco se topó con el lado más cruel del fútbol, la falta de efectividad que le impidió obtener un premio que hubiese sido justo a tenor de lo visto, sobre todo de una segunda parte en la que acabó volcado sobre área rival. Al final, una derrota por la mínima en el debut en Primera RFEF, pero que dejó patente que a este equipo lucha y empuje no le falta.

Arriba, Dani Hernández controla un balón entre rivales. | J. L. F. Magunagoitia saca un balón, ayer. | J. L. F. Piña, en una acción defensiva, ayer ante el Athletic. | J. L. F.

El Ruta de la Plata volvía a abrir sus puertas para un partido de estreno. Era la inauguración de la Primera RFEF y el primer partido oficial de una plantilla muy renovada respecto a la del curso anterior, y que sorprendió. Enfrente, una de las mejores canteras, un filial, el Bilbao Athletic, integrado por jugadores que tienen como reto demostrar que valen para el primer equipo, y cuya calidad técnica es indiscutible.

El Zamora CF mereció más

Así, con un once formado por Magunagoitia, Parra, Jon Rojo, Piña, Xisco, Astray, Javi Navas, Carlos Ramos, Dani Hernádez, Baselga y Coscia arrancó un encuentro en el que se ponían en juego los primeros tres puntos del curso y el Zamora FC, a pesar de no estar a su mejor nivel, no pensaba renunciar a ellos, y lo dejó claro.

El Zamora CF mereció más

Con energía e ímpetu arrancaron los de Movilla que tuvieron las primeras llegadas del curso a balón parado: la mejor, una falta que botó Carlos Ramos y que acabó en las manos del portero. Desde luego, si algo dejaron claro los rojiblancos es que estaban dispuestos a luchar y lo pusieron de manifiesto sin complejos ante un rival que fue de menos a más hasta hacerse, por momentos, con el control del choque aunque con un ataque estéril, al menos durante la primera parte, y es que sus llegadas, que fueron muchas, no llevaban peligro y apenas pusieron en apuros a Magunagoitia. Superados los primeros quince minutos en los que el Zamora CF dominó, el Athletic quiso imponer su fútbol y empezó a sumar metros y a tirar de velocidad, aunque apenas estaba probando a Magunagoitia y su ataque hacía aguas en los últimos metros.

En mitad de este acoso bilbaíno, hubo oasis, y Javi Navas pudo sorprender con un buen disparo que detuvo el meta visitante, y poco después con un tiro que se fue alto, pero que hizo a los aficionados levantarse de sus asientos.

ASÍ FUE EL MINUTO A MINUTO DEL PARTIDO EN DIRECTO

La imagen hasta el momento era buena, con un Zamora CF que estaba oponiendo resistencia y jugando sus bazas ante un contrincante más hecho a estas alturas de verano, algo que se iba notando cada vez más, aunque los locales no estaban desmereciendo. Una nueva falta que puso en juego Carlos Ramos y que acabó en el primer saque de esquina para el Zamora CF condujo a la mejor ocasión de los zamoranos hasta el momento con un barullo en el área y la defensa bilbaína despejando a duras penas. Era la recta final y la tónica continuó con un plantel visitante que pisaba constantemente área zamorana pero, afortunadamente, sin fruto para enfilar la segunda parte con todo por decidir.

Coscia fue el primer protagonista tras el descanso, con una gran galopada y un disparo alto cuando, eso sí, ya estaba rodeado de cuatro rivales. Fue, de nuevo, una declaración de intenciones del equipo zamorano que, al igual que en la primera parte, quiso comenzar mandando y buscando la sorpresa. El guion estaba siendo el mismo con un Athletic B que esperaba su oportunidad mientras cortaba cualquier atisbo de llegada rojiblanca, pero las fuerzas empezaban a flaquear y parecía necesario meter más fuelle arriba.

Dicho y hecho, Movilla empezó a mover la coctelera para reactivar al equipo y dar algo más de movimiento en los últimos metros. El desgaste estaba siendo absoluto y las ideas ya no se percibían tan frescas, y eso tuvo las peores consecuencias. Tras un robo en la frontal del área tras un error local, el balón le llegó a Serrano que de tiro raso superó a Magunagoitia para poner el 0-1 en el 62. Tiempo por delante había de sobra, pero las piernas pesaban cada vez más ante un Bilbao Athletic mucho más entero. Viendo el panorama, Movilla metió más frescura con un doble cambio en busca del empate, y nada más salir Dieguito lo rozó con un testarazo que se fue rozando el poste. El partido estaba abierto y el Zamora apostó fuerte como se demostró con un centro de Jon Rojo al que no llegaron ni Dieguito ni Losada por escasos milímetros, y poco después con un nuevo disparo que el meta detuvo en dos tiempos. Era el mejor momento de los zamoranos y debían aprovecharlo porque lo estaban mereciendo, pero la efectividad les estaba dando la espalda de forma cruel. Un centro de Kepa al que Losada llegó tarde se convertía en la enésima oportunidad de los rojiblancos que veían como se les escapaba un punto que estaban mereciendo. El equipo no se relajó ni en los seis minutos de añadido en los que se volcó sobre la portería rival, pero todo terminó con una mano salvadora del portero rival que evitó un empate que hubiese sido justo para empezar esta nueva etapa, y protestas contra los árbitros. Habrá que esperar a la próxima semana, el sábado, cuando visiten al Dux Internacional que perdió ante el Real Unión de Irún (2-1).