Todavía con el cuerpo dolorido, rememorando cada jugada vivida en Almendralejo y empezando a aceptar que la temporada se acabó. Así se encuentra la plantilla del Zamora CF horas después de caer eliminada del play-off, y es que los vividos ante el CD Badajoz fueron los últimos minutos de un equipo que ya es historia del club. Pocos podían esperar que el equipo llegara a clasificarse para la fase de ascenso a Segunda División A, máxime cuando eran un recién ascendido que iba a tener enfrente a pesos pesados con fuertes proyectos que finalmente quedaron fuera. Ahora llegó el “game over” del curso 20-21, y es momento de sacar conclusiones, que serán en su mayoría positivas. De este modo lo sienten unos jugadores que salieron del Francisco de la Hera con los ojos empañados en lágrimas pero que ya empiezan a ver todo lo que han conseguido hacer.

Ataque rojiblanco en el Francisco de la Hera. | E. F.

“Nadie esperaba esta temporada. Hemos ido partido a partido creyendo en nuestras posibilidades, y hemos llegado hasta aquí. Siempre he dicho que iba a ser hasta donde nos diera porque este equipo lo da absolutamente todo y nos ha dado hasta aquí. Hay que estar orgullosos”. Así se mostraba Carlos Ramos que hacía un rápido repaso a lo vivido, coincidiendo en sus palabras con Dani Hernández. “Estoy contrariado porque es difícil celebrar una derrota, pero después del año que hemos hecho, hay que estar orgullosos de nosotros, de la afición, del cuerpo técnico… de todos los que hemos formado el Zamora CF y con eso me quedo. Sabíamos que era difícil, pero no hemos perdido la cara al partido en la segunda parte y caímos con mucho honor, y eso es uno de los valores que nos caracteriza. Estoy orgulloso de defender esta camiseta”, señaló el capitán rojiblanco. En esta misma dirección, Carlos Ramos hacía hincapié en lo importante de lo vivido en los últimos tiempos y recordaba que “hace tres años estábamos muertos, a punto de desaparecer. Dani y yo jugamos un partido en el Ruta con 200 personas y a Badajoz fueron mil. Hay que dar las gracias a la afición porque estuvo de diez”.

Ambos jugadores coincidieron en que ahora lo que toca es descansar “disfrutar de lo logrado” en una temporada que calificaron de “dura y exigente”, sabiendo que esta será la última semana en la que este todo el grupo junto. A partir de ahora, aunque muchos tienen contrato en vigor, se abre plazo de reuniones, negociaciones y ofertas a la espera de como quede el Zamora 21-22.