Los niños ya no quieren llegar a ser futbolistas. Ya no esperan todo el día a que termine el colegio para poder ir a jugar a la plaza con sus amigos a la pelota. Ahora quieren llegar a casa, enchufar la consola y conectarse con sus ciberamigos para ganarles un partido de fútbol on line o eliminarlos con armas virtuales.

Los tiempos estaban cambiado y la irrupción de la pandemia del coronavirus lo ha disparado todo. La sociedad 2.0 ha modificado los intereses de las nuevas generaciones, que ven cómo sus nuevos ídolos no son los Gerard Moreno, Messi o Cristiano... sino que prefieren parecerse a Ibai Llanos, Doctore Pollo, The Grefg o DjMariio. Ahora los más jóvenes quieren convertirse en youtubers y llegar algún día a retransmitir sus partidas a millones de seguidores o a competir eventos con grandes premios de recompensa, lo que más les motiva.

España, en el 'top-10'

El mundo de los eSports se ha consolidado como una de las industrias con más presente y futuro de la economía mundial gracias a los millones de seguidores que genera en cualquiera de sus disciplinas. Según los últimos datos de la Asociación Española de Videojuegos, España ha llegado a facturar durante los últimos años 1.479 millones de euros, consolidándose como uno de los diez principales mercados mundiales del sector.

Unas cifras que llaman todavía más la atención si se tiene en cuenta que gran parte de los servicios que se consumen en esta industria son gratuitos, puesto que solo con acceso a internet se puede optar a cualquier contenido en las plataformas principales: Twitch, Youtube o Facebook Live.

Asimismo, la facilidad con la que cualquier persona puede emitir sus partidas de cualquier videojuego hacen que sean millones de adolescentes los que se animen a iniciarse en el mundo del streaming y dejen de un lado actividades deportivas como podría ser el fútbol, baloncesto, tenis, etc.

Pablo explica a Mediterráneo que "es una manera de desconectar del día a día y de poder estar cerca de tus amigos". "Empecé a jugar más a partir del confinamiento del año pasado. Era una manera de seguir teniendo contacto con la gente y que pasara el rato más rápido", afirma.

Este joven de 17 años de la capital de la Plana asegura que 'el Fortnite' es el juego que más le gusta porque "es muy divertido". "Se trata de una isla imaginaria en la que caes junto a 99 personas y donde tienes que sobrevivir para ganar la partida. Además, puedes jugar hasta con cuatro amigos a la vez para poder ganar", detalla. Por su parte, Iker, de Vila-real, prefiere el FIFA 21: "Cuando era pequeño jugaba con mi padre partidos a la consola y ahora gano a gente de todo el mundo con Cristiano y Mbappé en el Villarreal", bromea el joven jugador. 

Respecto al futuro de trabajar en el mundo de los videojuegos, Iker manifiesta: "Me encantaría dedicarme profesionalmente, es un hobby que me divierte mucho y encima últimamente tiene mucho futuro, puedes llegar a ganar mucho dinero trabajando desde tu casa y haciendo lo que más te gusta".