El Caja Rural Amigos del Duero dio hoy un paso más hacia la permanencia al conseguir superar al colista del Grupo V de Primera Nacional, el San Pío X, por 2-3 en un duelo que las amarillas resolvieron a su favor en la segunda parte.

El conjunto de Nacho Merino no tira la toalla y, pese a tener que emplearse a fondo, está dispuesto a acumular todos los puntos posibles para buscar salvarse. Un trabajo que brilló especialmente hoy en Valladolid, en un partido clave para los intereses zamoranos.

La contienda arrancó muy igualada, con ambos equipos alternándose en el dominio del envite y ocasiones en ambas porterías. De ahí que no extrañara que, al paso por vestuarios, el marcador reflejara un empate (1-1) que dejaba las espadas por todo lo alto de cara a un segundo tiempo cargado de tensión.

El paso por vestuarios sentó muy bien en las filas del Amigos del Duero que, consciente de la importancia del envite, regresó al campo dispuesto a desfondarse. Su ímpetu tuvo pronto premio pues, en uno de sus ataques, la zaga del San Pío X cometía un claro penalti que se encargaría de transformar María González.

Con el 1-2, las locales trataron de estirar líneas para ir en busca del empate y atenazar al bloque de Nacho Merino pero, en esta ocasión, las zamoranas se mostraron muy sólidas y fueron capaces de incrementar su renta por mediación de Blanca cuando restaban veinte minutos para el final.

Pese a la renta de dos goles, el partido estaba lejos de estar decidido y las zamoranas tuvieron que sufrir de lo lindo para acabar cosechando los tres puntos pues su adversario consiguió recortar diferencias antes del final con el definitivo 2-3 que acabó imperando en el marcador.