El Innova Chef afronta un final de Liga regular algo peculiar y es que, a pesar de ser la última jornada, a Melilla le quedarán cinco partidos que disputará a lo largo de la semana siguiente, un hecho que, sin duda, desvirtúa la competición y que propicia que el futuro de muchos equipos pueda quedar en el aire unos días más. “La Federación toma las decisiones que considera que son más adecuadas, pero a nivel deportivo sale de ojo que se vayan a celebrar cinco o seis partidos, una vez que el resto de participantes hemos acabado”, indicó Saulo Hernández quien recalcó que, a priori, sí puede suponer desvirtuar la competición, aunque “a día de hoy no sabemos a quién beneficiará o perjudicará, pero no es lo ideal”.

Esta última jornada el CB Zamora se desplaza a Morón “en una situación comprometida”. “Hay seis equipos en liza que nos estamos jugando dos posiciones de play-off, dos de acabar la temporada y dos de play-out de descenso. Tenemos el basketaverage perdido con los cinco equipos con los que nos lo estamos jugando, así que de cara a Morón es claro: Si perdemos, al 99% jugamos play-off de descenso y si ganamos, tenemos opciones de salvarnos o luchar por el ascenso, pero no matemáticas”. “Son tantas cábalas que nosotros nos lo planteamos como una final en la que sabemos que la única opción que tenemos de seguir con vida es ganar, y así vamos”.

En cuanto a Morón, el entrenador recordó que “nunca he ganado ahí” y comentó que es un sitio especial, un pabellón pequeño que mete mucha presión y eso hace que ningún jugador local se deje llevar.

En cuanto al estado de los suyos, aunque sí hay muchos hombres con problemas físicos como Molins, que es baja segura, Mario, Costa, Nnamdi… dejó claro que están con mucha moral tras la victoria del miércoles, y con esa actitud afrontan el encuentro de mañana domingo a las 19.00 horas. “El equipo estaba tristón, con la sensación de que hacíamos las cosas bien pero no conseguíamos ganar, y el ganar así, a un equipo que jugó como lo hizo Zentro, llevó a que yo pudiera ver otra vez esas caras de alegría y de sentirse vivos. Confío en que esa moral la encaucemos bien para entender que tenemos que hacer un último esfuerzo y el más importante de todos porque es el partido más importante que nos queda ahora mismo”.