El salmantino Pablo Cortés se convirtió ayer en nuevo entrenador del CD Villaralbo tras la destitución de Félix Domínguez. Armando Santos, José Luis Vicente y Guti completan el staff del nuevo técnico azulón como segundo entrenador, entrenador de porteros y preparador físico, respectivamente.

Pablo Cortés cuenta con una sólida y ambiciosa trayectoria. En la temporada 2017-2018 ascendió de Tercera División a Segunda B al primer equipo del Salamanca UDS; en la 2018-2019 materializó el salto de categoría con el filial, de Preferente a Tercera División y en la 2019-2020, media temporada estuvo al frente del filial en Tercera y el resto del curso se hizo con los mandos del primer equipo del Salamanca UDS en Segunda B.

Su juventud, indicaron desde la entidad, va unida a una exigente formación y el conocimiento de las distintas categorías. Una trayectoria profesional meteórica que le ayudará a la hora de enfrentarse al banquillo del club villaralbino con ilusión y con el reto de jugar la fase de ascenso con el conjunto que preside Juan Ramón Saludes, en una temporada que exige ser ambicioso.

Sobre su llegada, Cortés ha querido agradecer “al club y al presidente, Juan Ramón Saludes, la confianza depositada tanto en mí como en el staff técnico. Para nosotros es un reto muy bonito pertenecer a un club como el Villaralbo y desde el primer contacto mantenido he percibido la confianza hacia mi persona. Esa confianza la voy a devolver con mucho trabajo”. La incorporación del salmantino fue inmediata y ayer ya dirigió la primera sesión de entrenamiento en el Municipal de los Barreros con la primera toma de contacto con la plantilla para comenzar a preparar el encuentro ante el Ribert, un encuentro que se disputará este sábado y en el que no podrá contar con el meta Pereira, sancionado en el último encuentro ante el Coreses.

En este sentido, añadió el técnico salmantino, a través del club, “sabemos que en poco tiempo tenemos un partido difícil contra el Ribert pero desde el primer día tenemos que ser un equipo competitivo y ambicioso”.

Respecto a los objetivos que se marca se encuentran “ser cada día mejores, la clasificación al final de temporada lo dirá, pero vamos a ponernos como meta el trabajo constante cada jornada y poder competir contra cualquier rival”.

En otro orden de cosas, y siguiendo en la Regional de Aficionados, ya hay sanciones para los altercados ocurridos en el Coreses – Villaralbo del pasado domingo y que obligaron a la suspensión del encuentro cuando se alcanzaba el minuto 88 de derbi provincial en la Regional de Aficionados.

Así, el Juez de Competición de la Federación de Castilla y León ha decidido dar el encuentro por finalizado con el resultado de 1-1 que reflejaba el marcador en el momento de la vergonzosa tangana que comenzó cuando un jugador local saltó a la grada y agredió a una persona del público.

En cuanto a las sanciones, se castiga con cuatro partidos al jugador del Coreses Calleja por agresión al público, y uno más por acumulación de amarillas, por lo que el equipo zamorano no podrá contar con él en los próximos cinco partidos.

En el Villaralbo se castiga al portero Pereira y al integrante del staff técnico Guti con dos y un partido, respectivamente, por hacer observaciones no apropiadas al colegiado. Además, multan a la entidad azulona con 90 euros por el comportamiento de sus aficionados, y no hay sanción económica para el Coreses, algo que sorprende al club villaralbino.

Se pone así fin a una bochornosa situación ocurrida en el fútbol zamorano que desde ambos clubes confían en que no se vuelvan a repetir.