La derrota en Las Palmas del pasado jueves ha sido prácticamente definitiva para un Quesos El Pastor que está prácticamente sentenciado al descenso que le ha rondado en las últimas campañas. Ya tan sólo queda recurrir a un milagro que sería ganar y ganar partido tras partido los seis que quedan para finalizar la Liga y esperar que los rivales hagan todo lo contrario hasta entonces.

No cabe ninguna duda de que es casi imposible ganar cuatro partidos para alcanzar a Cáceres y uno más por cada uno en que venza el equipo extremeño. Además habría que esperar que Bembibre no venza en más de uno o dos encuentros.

La situación es pues desesperada, lo que sin embargo, servirá para que el Quesos El Pastor afronte sus partidos con menos presión de la que ha tenido que soportar hasta ahora y eso es positivo. En todo caso, nadie duda de que nuestras jugadoras mantendrán el nivel de profesionalidad que se les supone y la afición podrá disfrutar de los triunfos que pueda todavía ofrecer independientemente de que traigan consigo o no la salvación tan ansiada.

Toda la 25ª jornada se disputará durante el día de hoy y en el Angel Nieto, el Quesos El Pastor recibirá a un Casademont que afrontó la liga como un equipo llamado a plantarle cara al grupo cabecero de la Liga y finalmente ha estado a punto de pasar apuros en la clasificación.

Carlos Iglesias dirige una plantilla bien armada en la que contaba con verdaderas estrellas del basket europeo como es nuestra Laura Nichols que regresaba a España tras un largo periodo jugando en el extranjero; a la que se ha sumado hace unos días la campeona de la WNBA Anna Cruz que ha llegado desde Araski. Además la jugadora que está consiguiendo mejor rendimiento es la norteamericana Markeisha Gatlin que promedia 20 puntos y 8 rebotes por partido. No le va a la zaga su paisana Taylor Wurtz, una gran triplista, o la internacional belga Julie Vanloo.

Se trata de la plantilla más internacional de la Liga en la que la presencia española es escasa aunque hay que destacar la oportunidad que se le ha dado a la jovencísima Aina Ayuso que actúa como base 19 minutos por partido.

En el Zamarat, la gran incógnita será comprobar si puede volver a jugar Amy Okonkwo tras el inoportunísimo esguince de tobillo que le ha tenido parada durante un mes.