El Real Oviedo confirmó ayer el positivo por COVID-19 de su entrenador, José Ángel Ziganda, que lleva aislado en su domicilio desde el pasado martes. El navarro, que se encuentra “en perfectas condiciones”, lleva aislado desde que una persona de su entorno presentó síntomas por lo que cuando se confirmó el positivo de su contacto estrecho, el míster oviedista ya estaba apartado de la dinámica del equipo. El oviedista está integrado en el día a día azul a través de las retransmisiones en línea de los entrenamientos.