Uno de los blanquiazules se somete a un test PCR. | D. S.

La plantilla y cuerpo técnico del Desguaces Casquero se sometió el pasado jueves a una nueva ronda de test de antígenos para poder reanudar los entrenamientos en su vuelta a la competición oficial. La plantilla, que contó con tres días de descanso tras la victoria el pasado domingo 3 de enero en Santiago de Compostela por 3-6, regresó con brío a su labor.

Nuevamente y como en todas las pruebas de antígenos realizadas en los últimos meses, pleno de negativos. Un resultado que no debería ser noticia pero que debe ser destacado después de que numerosos equipos hayan notificado algún positivo en sus filas debido al contacto en festividades navideñas. El servicio médico encargado de gestionar los posibles positivos en el conjunto de Benavente aún no ha tenido que notificar ningún caso positivo en su primera plantilla, un hecho que les ha permitido competir con regularidad.

Ahora, jugadores y cuerpo técnico preparan el siguiente encuentro liguero. Un partido que les llevará el próximo sábado, 16 de enero, a la localidad gallega de Noia para enfrentarse al líder y equipo con mayor puntuación de toda la Segunda División. Los gallegos mandan con 25 puntos en las nueve jornadas disputadas, sumando ocho victorias y solo un empate. Sin duda, un hueso duro de roer.

Los noieses que no han conocido la derrota en su pista en todo el 2020, no han descansado este fin de semana ya que se enfrentaban al Burela, equipo de Primera División, en la final de la Copa Xunta de Galicia 2020 que se disputó ayer en Narón y que acabó con un resultado de 5-2 en favor de Burela.