Ganar a Perfumerías Avenida es siempre una tarea prácticamente imposible de llevar a cabo (de hecho, se mantienen invictas en Liga) pero si encima solo cuentas con siete jugadoras, el objetivo es imposible. El Quesos El Pastor cumplió el trámite y el pronóstico y cayó este sábado en su visita al equipo charro, actual líder de la Liga Femenina frente a la posición de colista que ocupan las naranjas. En el Zamarat ya sabían que el triunfo era una quimera, pero lo que no querían era hacer ridículo en el derbi regional, y menos aún después de su victoria en La Seu que debe ser un punto de inflexión.

Desde el primer minuto se vio un equipo serio sobre la pista que mantuvo el envite a las rivales con un ritmo alto de juego, a pesar del parcial de 8-0 de inicio. Siempre por detrás en el marcador, las naranjas intentaban seguir la estela de las salmantinas con una Vanessa Gidden que tomó el mando frente a su exequipo y desde los tiros libres conservaba el partido abierto (12-7, min. 5). Apretando el acelerador de forma intermitente Avenida mantenía a raya a las de Fran García (24-9, min. 7), pero en un par de fogonazos coronados por un gran triple de Lizarazu el Zamarat lograba bajar de la barrera psicológica de los diez puntos, aunque al segundo tramo llegaron once abajo (26-15). En los siguientes diez minutos de juego el guion se mantuvo. Tal era la intensidad y concentración con la que el equipo zamorano estaba en pista, que logró colocarse a siete puntos de las rivales (32-25). Perfumerías, a través de un tiempo muerto, volvió a reaccionar para volver a poner tierra de por medio (47-29, al descanso).

Con la reanudación en el segundo tiempo, las locales salieron con una marcha más. Al CD Zamarat apenas le aguantaba la gasolina tras el desgaste realizado y comenzaban a parecer los primeros errores y se perdía precisión. Superada la barrera de los veinte puntos (58-35) ya estaba todo dicho en Wurzburg, pero era importante mantener la actitud y en esto el Quesos El Pastor estaba cumpliendo, con Gidden como su principal referente y máxima anotadora, y tratando de mantener el orden y el ajuste en defensa. 

El 67-43 dejaba poco espacio para la sorpresa en el pabellón salmantino. El CD Zamarat ya había perdido la frescura de la primera parte, algo normal dada la situación de haber acudido con siete jugadoras, pero aún quedaba espacio para el pundonor con triples de mérito como el que tuvo Montoliu.

80-50 a falta de menos de cinco minutos tocaba aguantar, aunque ya sin fuerzas. Finalmente un 91-58 en un encuentro más complicado de lo habitual en el que se mostró coraje, hasta que duró el oxígeno.