El Real Madrid inició 2021 con un cómodo triunfo ante el Celta de Vigo cimentado en dos goles de Lucas Vázquez y Asensio, así como en la extraordinaria actuación de Modric en la medular.

Apenas pasaban cinco minutos de juego cuando llegó una de las acciones determinantes del partido. El Celta asomó a la meta de Courtois y tuvo en botas de Iago Aspas el primer tanto de la noche, con un remate picado que batió al meta belga pero que Nacho salvó antes de traspasar la línea de gol. Y, del posible 0-1, se pasó al 1-0 sin que el juego se detuviera ya que el balón, en un envío largo, acabó llegando a Asensio que centró para que Lucas Vázquez inaugurara el marcador con un certero testarazo.

El gol otorgó el dominio del juego a los de Zidane que, sin embargo, fueron encontrando más oposición en el Celta con el paso de los minutos. Aun así, ni unos ni otros gozaron de muchas ocasiones ni acertaron con la meta rival antes del descanso.

La segunda mitad pintaba interesante pero todo cambió cuando Iago Aspas se lesionó y, acto seguido, un robo del omnipresente Modric se tranformaba en una asistencia de Lucas Vázquez que Asensio no desaprovechó. Fue el 2-0 y el punto en el que acabó por desequilibrarse el envite, que pasaría a manos blancas sin muchos sobresaltos, siendo manejado en todo momento por el talento de Modric.