La selección española femenina de balonmano se despidió del Europeo de Dinamarca 2020 con un empate ante Montenegro (26-26) con sabor a derrota porque fue incapaz de rentabilizar los hasta ocho goles de ventaja (4-12) que tuvo en la primera parte.

Lastrada por la misma irregularidad que le ha impedido realizar un partido completo durante todo el torneo, la selección española no solo no fue capaz de defender su renta en la segunda mitad, sino que tampoco pudo aprovechar el balón final del que dispuso para alzarse con la victoria.

Pese a hacer llegar el balón con ventaja a Jennifer Gutiérrez, la extremo española no fue capaz de superar a la portera montenegrina Ljubica Nenezic, que se convirtió en el segunda período en una auténtica pesadilla para las “Guerreras”.

Un decepcionante empate final (26-26), que pocos hubieran podido imaginar, tras la espectacular puesta en escena de las jugadoras entrenadas por Carlos Viver.