El CD Coreses se ha sumado a un grupo de ocho clubes de Castilla y León que han solicitado a la Federación de Castilla y León de Fútbol el retraso en el comienzo de la Liga Regional de Aficionados alegando la falta de garantías de seguridad sanitaria en una categoría en la que los clubes carecen de medios para afrontar la lucha contra el COVID. Los clubes que se han negado a comenzar a competir este fin de semana han sido lideratos por el San Agustín de Valladolid, al que se han ido sumando Universitario, Coreses, San Esteban de Gormaz, Abejar C.F., Castilla-Palencia, Polideportivo Salas, Villamuriel y el Navega de Salamanca. En un principio eran quince los clubes, entre los que estaba la UD Bovedana, pero actualmente son ocho. Los otros tres clubes zamoranos de la categoría (CD Benavente, Villaralbo y UD Bovedana) están dispuestos a iniciar la Liga este fin de semana.

Estos ocho clubes piden que se aplace la competición hasta que mejore la situación epidemiológica alegando que no disponen de medios ni para realizar test con la debida periodicidad, y que supone un alto riesgo de contagio el que tengan que realizar los desplazamientos en autobuses o coches particulares, como ocurre en todos los casos.

La Federación ha recordado que en la elaboración del calendario se han incluído varios fines de semana para disputar los partidos que tengan que ser aplazados, y tampoco adoptará medidas disciplinarias duras si estos equipos renuncian finalmente a competir esta temporada.