Unión Africa Ceutí: Soares, Anuar, We Casas, Galán y Sufian. También: Schusterman, Santi, Manu Orellana, Everton, Jaime, Dani Cabezón.

At Benavente FS: Dani Simón; Dilin, Iván Domínguez, Sergio Simón y Malaguti. También: Charlie, Dani Martín, Novoa, Tomy, Fran, Germán Romero, Marcos Vara, Sergio Hernández, Yayo.

GOLES: 1-0 (22´): Sufian. 1-1 (25´): Fran. 2-1 (27´): We Casas. 3-1 (32´): We Casas. 4-1 (36´): Sufian. 4-2 (39´): Dilin.

ÁRBITROS: Barrilero Mohedano y Ugarte Ruíz. Tarjetas amarillas: Sufian, Anuar, Cabezón, Valladares (entrenador); D. Simón, Dilin, Hernández, Vara.

PABELLÓN: Guillermo Molina. A puerta cerrada.

El Atlético Benavente FS no pudo sacar nada positivo de su largo viaje a Ceuta y cayó derrotado de forma holgada ante un Unión Africa Ceutí que no mereció tanto premio. El partido en su primera mitad fue contenido, de pocas ocasiones y ningún gol; mientras que en la segunda nadie especuló y hubo ocasiones muy claras en ambas porterías, pero los zamoranos no tuvieron fortuna y los caballas exhibieron pegada para llevarse un triunfo claro.

Ambos saltaron a pista tomando muchas precauciones en lo defensivo, pero la primera oportunidad llegó al minuto de juego con una falta en la frontal del área local tras una cesión punible al portero. Durante los primeros minutos los dos equipos optaron por una presión a media pista, pero los caballas no tardaron en ejercerla a tres cuartos de pista aunque eso sí, al igual que los visitantes sin conseguir apenas robos ni generar superioridades.

Así, llegados al minuto cinco el ritmo seguía siendo pausado, de mucho toque horizontal y escasas ideas en lo ofensivo, pues apenas si se había visto algún disparo aislado y lejano, ninguna acción de estrategia peligrosa, casi ninguna falta y pocos despistes defensivos. A ello ayudaba las generosas rotaciones que tanto el entrenador local Santi Valladares como el visitante Chema Sánchez no tardaron en hacer.

La ausencia de llegadas y la poca fluidez de la circulación de pelota, de dos quintetos que arriesgaban muy poco a la hora de irse hacia adelante, provocó que el choque avanzara contenido y poco vistoso. Así en el ecuador de la primera parte que el portero local Soares hiciera una salida en falso que Sergio Hernández estuvo a punto de aprovechar, significaba toda una novedad y la mayor de las emociones hasta el momento. Al poco el propio pivote amarillo imponía su físico en zona peligrosa y volvía a generar inquietud en las filas locales.

Parecía que el partido cambiaría de dinámica, pero no fue así pues los benaventanos no tuvieron continuidad en ataque y el juego regresó al cauce anterior aunque quizás jugándose a un ritmo más alto con constantes rotaciones de banquillo.

A la vuelta de vestuarios los equipos regresaron con el mismo planteamiento que antes, sin exponerse lo más mínimo y buscando la solidez en todo momento. Pero en el minuto 2 se producía una pérdida en mitad de pista visitante y el local Sufian aprovechaba para sacar un disparo raso pegado al palo derecho que significaba el primer gol de la mañana.

El tanto removió el partido como nunca antes y en cuestión de segundos, Malaguti se marchaba a trompicones, pero su disparo de gol lo sacaba Soares con una mano arriba prodigiosa. El Benavente apretaba e instantes después conseguía sacarle la tercera falta a los caballas cuando todavía no se había cumplido el minuto 3.

No sólo eso, dos más tarde llegaba el empate con un gol de estrategia, en un saque de banda de Yayo directo al segundo palo atravesando toda la defensa local que Fran remachaba a la red totalmente solo.

El empate dio el punto de partida a una fase de ataques constantes, especialmente de los amarillos, que contrariamente a lo esperado tendría otro punto de inflexión con el segundo gol ceutí. El Benavente jugaba sus minutos más intensos cuando una falta lejana botada por Schusterman terminaba, tras varios rechaces, en las botas de un We Casas que no desperdició el claro hueco que tenía para marcar.

Después el ritmo no se rebajó, pero ahora era el Ceutí quien achuchaba mucho y otra vez de estrategia Manu Orellana pudo marcar, pero el cuero se estrelló en el palo después de rozarla Simón. Cumplida la media hora la tensión aumentaba, se presionaba a toda pista y cualquier cosa podía pasar porque ya no se especulaba nada y los porteros eran los grandes protagonistas con sus buenas intervenciones.

Hasta que a falta de menos de 8 minutos para la conclusión un nuevo robo en media pista del local Rubén lo finalizó We Casas en superioridad con un disparo que se coló entre las piernas de Dani Simón. El partido se ponía de cara a los blanquinegros, más cuando en segundos Malaguti hacía una quinta falta bastante ingénua, pero vista la actitud de los amarillos quedaba claro que sudarían hasta el final.

El equipo zamorano comenzó a arriesgar y tensionó por completo el choque, llegaron las protestas de todos y amarillas al banquillo local, también la quinta falta caballa a 5 minutos de la conclusión y al poco un "diez metros" donde Sergio Simón se encontró con Thiago Soares y con la mala fortuna de un rechace que le cayó a Manu Orellana para montar la contra que Sufian remachó a la red prácticamente sentenciando con el cuarto.

Entonces el Benavente colocó a Dilin con camiseta de portero y no se rindió hasta el final, pero tampoco afinó cara a puerta pese a que tuvo un par clarísimas ocasiones y no pudo reengancharse a la pelea por el resultado porque el segundo gol zamorano llegó a falta de 25 segundos para la conclusión.