Mereció sumar el Atlético Benavente ante un Noia Portus que se llevó los tres puntos de su visita a la Rosaleda, aunque no sin sufrir y pasar apuros. Precisamente, se cumplía un año desde la última victoria visitante en el feudo benaventano, precisamente el conjunto gallego en Copa del Rey.
Comenzó golpeando primero el Atlético Benavente. Dani Martín en una gran acción colectiva se plantaba solo ante Álex Pérez y con calidad batía al portero gallego en el minuto 3 de partido. Giro en el guion de un encuentro en el que a priori los gallegos aterrizaban con vitola de favoritos.
Durante varios minutos los locales aguantaban el empuje de los visitantes madurando el encuentro y teniendo opciones para ampliar la ventaja sobre todo a balón parado. En un córner Noia empataba el encuentro con una gran acción de estrategia por mediación de Rangel.
Un gol que sacó del encuentro a los locales que no supieron reaccionar y en un error en elaboración veía como Noia daba la vuelta al partido con un nuevo tanto de Antonio Díz. Tiempo muerto de Chema Sánchez que en apenas un minuto se veía por detrás en el luminoso. Más desventaja habría en el marcador cuando Pirata, cerca del descanso, ponía el tercero con un fuerte disparo desde la frontal.
Pese a ponerse por delante en el marcador, los blanquiazules se iban al descanso por debajo con una diferencia de dos goles. Los gallegos aprovecharon varios errores y desajustes de los benaventanos para remontar.
El paso por vestuarios cambió el ritmo del encuentro. Los locales enchufados buscaban con ansia la portería de Noia. Cuando mejor estaban los benaventanos, Alex Naranjo batía la portería local con un fuerte disparo que ponía más difícil las cosas para los de Sánchez. Con más de 15 minutos por delante, los locales tenían la difícil misión de remontar 3 goles ante un equipo que sin grandes méritos se veía cerca de sumar 3 puntos.
Pero la Rosaleda es un campo complicado donde los partidos son difíciles de cerrar. Primero Sergio Simón con algo de fortuna en un saque de banda al golpear el balón en Pope y después Malaguti con una acción individual por banda derecha que acaba con un disparo ajustado en la escuadra derecha, recortaban diferencias poniendo emoción al final del partido con más de 5 minutos aún por jugar.
Charlie tendría dos para empatar, primero con un disparo que se estrellaba en el palo y después con una acción en la frontal del área que Álex desbarataba con una gran mano. Con 2 minutos para el final, los locales arriesgaban con portero jugador donde tendrían una ocasión más para empatar. Dani Martín dispara desde 15 metros, pero el pie del guardameta noiés salvaba los muebles gallegos que se llevaban una victoria muy sufrida ante un rival digno que mereció más.
El siguiente encuentro de los de Benavente será el próximo fin de semana donde se desplazarán a la ciudad autonóma de Ceuta para medirse al verdugo de su primer intento de ascenso, Unión África Ceutí.
