Debut con victoria para un Atlético Benavente que se llena de moral para conseguir el objetivo de la permanencia en una temporada exprés marcada por el coronavirus. Una victoria sufrida ante uno de los gallitos del grupo que pese a adelantarse desde los 10 metros, no pudo reaccionar en la segunda parte al vendaval blanquiazul que se lleva los 3 primeros puntos de la Rosaleda.

Comenzaba la temporada de la ilusión en Benavente. Después de 20 años, la ciudad volvía a disfrutar de la segunda categoría del fútbol sala y vamos que si han disfrutado. Pese a disputarse a puerta cerrada, los seguidores de la retransmisión han visto como prácticamente el mismo equipo que arrasó la pasada temporada en Segunda B, compite y es capaz de ganar perdidos en Segunda División.

El encuentro comenzó con una defensa alta de los de Chema Sánchez intentando robar ante el juego de cuatro madrileño. Un juego alegre que fue cargando de faltas a los de Benavente en su intento por frenar unas llegadas que no creaban demasiado peligro, pero obligaban en los últimos minutos de la primera mitad a los de Benavente a perder altura. Las más claras de la primera mitad para los de Benavente. A balón parado los blanquiazules castigaban a los de Móstoles que tuvieron en las botas de Kiki las dos más claras para los visitantes, ambas detenidas por el portero local.

Carlitos, a falta de 5 para el descanso rompía el empate desde el punto de doble penalti. 0-1 y el partido al descanso con toda la segunda mitad para resolver la primera jornada de liga.

La segunda mitad de los chatarreros estuvo marcada por la intensidad defensiva. La alta presión de este equipo dificultaba la circulación de Móstoles que comenzaba a verse algo ahogado en elaboración y cometiendo excesivas pérdidas.

Con la estrategia llegó el empate. Malaguti al segundo palo a la salida de un saque de banda aprovechaba para poner el empate y dar alas a los de Benavente que se metían de nuevo en el partido. Acto seguido llegó el tanto que ponía a los de Benavente por delante. Charlie que aún con molestias pudo jugar, recibía en posición de pívot, rechace del portero y la segunda acción era aprovechada por Iván Domínguez que con pierna zurda batía a Recio para éxtasis benaventano.

2-1 y 10 minutos por delante. La euforia local contrastaba con el cansancio físico que se acumulaba en las piernas de los locales. Más euforia llegaría cuando Sergio Simón ponía el tercero al segundo palo empujando el balón al fondo de la portería. 3-1 y cinco minutos donde los de Sánchez tendrían que defender el juego de cinco madrileño. Con portero jugador a falta de 3 minutos, los de Móstoles comenzaron a apretar el área local. Al final Kiki, de disparo certero recortaba con la distancia a falta de 30 segundos. Tuvieron que sufrir varias a acciones a balón parado los de Benavente para llevarse finalmente los tres primeros puntos de la Rosaleda y celebrar su llegada a la Segunda División.

Al final del encuentro, el técnico local Chema Sánchez valoraba así la primera victoria de la temporada: “Hemos estado muy disciplinados tácticamente y hemos seguido el guion de partido que nos habíamos marcado”. Asimismo comentó que “al final sabíamos que teníamos que sufrir en defensa y que íbamos a tener minutos de desgaste en defensa posicional porque circulan muy bien el balón, y hemos sido inteligentes porque no podíamos jugarles de tú a tú. Sobre ese guion hemos ido creciendo y al final deberíamos haber ganado con un poquito más de solvencia”, concluyó.