Jesús Benito afronta esta nueva etapa en el club muy ilusionado y agradecido por la confianza puesta en él. La UD Toresana prepara la temporada 20-21 y el entrenador salmantino ya tiene prácticamente confeccionada la plantilla para competir por el ascenso a Regional de Aficionados.

El club azulón se ha reinventado para formar un grupo que sepa luchar por el ansiado ascenso. En esta línea, Jesús afirma que “aspiramos a todo, vamos a ser ambiciosos”. Estamos hablando de siete fichajes nuevos que se confirmarán las próximas semanas, cinco de ellos provenientes de Salamanca, con amplia experiencia en el futbol regional y dos cercanos a Zamora. A estas incorporaciones hay que sumar caras ya conocidas en el V Centenario, vuelven jugadores como Tororo, Chupe o Víctor. También suben dos juveniles al primer equipo, por lo que actualmente el grueso de la plantilla está cerrado con 19 jugadores.

Así mismo, el técnico asegura que “todos los que no iban a continuar este año, hablaron conmigo y se han quedado”, los jugadores que no siguen la próxima temporada han expuesto sus problemas a la hora de compaginar el fútbol con su trabajo. Jesús se califica a sí mismo como un trotamundos del fútbol, ha llegado a entrenar hasta en 10 equipos, en cinco de los cuales ha repetido en varias etapas.

Tras pasar por clubes como la Unión Deportiva Santa Marta, Villaralbo, Peñaranda o Alba de Tormes la pasada temporada, hace frente ahora la que será su tercera etapa en el club toresano “entusiasmado por que la plantilla está comprometida” nos cuenta Benito, “me llaman y me dicen: míster cuando empezamos. A mí me ilusiona que estén tan metidos en el proyecto”, admitió el entrenador.

Las negociaciones para su llegada al club cermeño se llevaron a cabo durante el los meses de confinamiento. La oferta surgió durante una charla telefónica en tono amistoso con el presidente de la entidad “Iñaki me llamo y me contó la situación, me necesitaba y yo se lo debía”. Jesús se muestra muy agradecido al club y la ciudad, “me fui en un momento personal muy duro y ellos lo entendieron. Mi promesa era volver aquí, me siento muy valorado”.

Los objetivos que se marca en este nuevo proyecto nos son otros que el ascenso, quiere devolver a la UD Toresana donde se merece estar. Aún sin fechas para empezar la pretemporada pero si preparando planes específicos para llevar a cabo entrenamientos en solitario para la puesta a punto de los jugadores. Una vez se inicien los entrenamientos, la idea es disputar siete amistosos, de los cuales ya hay alguno cerrado con equipos de Salamanca y Zamora.

Los equipos por los que ha pasado el entrenador salmantino se caracterizan por desarrollar un fútbol vistoso “aunque muchas veces me han dicho que soy amarrategui” bromea Jesús.

También se incorpora al club Carlos Bernal, que pasará a ser el segundo entrenador y hará las veces de entrenador de porteros.

Con el desconocimiento que hay actualmente sobre cómo y cuándo empezará la temporada, el entrenador toresano asegura que va a ser una liga muy disputada con la incorporación a la categoría del Zamora B. Teniendo en cuenta el nivel que ya tenía la provincial será una temporada a seguir.