La Liga Nacional de Fútbol Sala (LNFS) y sus clubes han remitido a la presidenta del Consejo Superior de Deportes (CSD), Irene Lozano, un escrito en el que han expresado su desacuerdo sobre el calendario de Primera y Segunda División elaborado por la RFEF para la temporada 2020-21, donde el organismo "no ha atendido a ninguna de las propuestas" que le han remitido los equipos.

Los clubes han solicitado retrasar el inicio de la competición al 26 de septiembre para favorecer la vuelta a la actividad competitiva de manera progresiva, a través de un período preparatorio tras el parón de las competiciones y el confinamiento sufrido por la COVID-19, para tratar de evitar el riesgo de lesiones. "El calendario aprobado por la RFEF plantea la disputa de 19 jornadas de Liga hasta finales de diciembre, lo que los clubes consideran poco recomendable asumir tres partidos con sus respectivos viajes en un ciclo de tan solo 7 días, atentando contra el período mínimo de 72 horas entre competiciones de forma continuada", denuncian.

Los clubes se consideran los "protagonistas" de una temporada donde asumen todos los riesgos a nivel deportivo y económico y son los encargados de velar por la salud y el bienestar económico de los jugadores, "factor que no ha tenido en cuenta" la RFEF a la hora de aprobar el calendario.

En Segunda División, donde estará el Atletico Benavente, "tampoco ha sido estimada ninguna petición" propuesta por 9 de los 13 clubes que han formado la categoría de plata esta temporada, y comenzará la competición el 19 de septiembre.“A veces los sueños se cumplen”. Así rezaba la camiseta conmemorativa que los jugadores del Desguaces Casquero lucían tras conseguir la victoria el pasado sábado. Un sueño que los Charlie, Marcos Vara, Sergio Simón y compañía han hecho realidad. La llegada de jugadores de la casa consagrados y la suma de jóvenes talentos salidos de la cantera han hecho un cóctel explosivo que a punto estuvieron de conseguir el ascenso la pasada campaña y que es ya una realidad en la 2020/2021. 22 años han tenido que pasar para que la ciudad se despertase viendo a su equipo en Segunda División.

Un ascenso que en circunstancias normales se debería haber resuelto por el mes de junio y que una pandemia ha retrasado hasta la fecha. Ahora, casi sin tiempo para descansar se debe preparar una plantilla de garantías que permita afianzar este proyecto en Segunda División. Y es que el calendario de Segunda División ya se ha aprobado aún sin confirmación de los equipos que conformarán la segunda categoría del futbol sala nacional. Según el calendario aprobado por la Real Federación Española de Fútbol, la liga comenzará el próximo 19 de septiembre, mientras que la última jornada está programada para el 24 de abril. Con la proximidad del inicio, pocos serán los días de vacaciones los que gozarán los jugadores antes de volver a la pretemporada.

El calendario ha marcado también las fechas para la disputa de la Copa del Rey. Los Benaventanos, en principio exentos de la ronda previa, comenzarán su andadura en el torneo del “KO” a partir del 27-28 de octubre. El parón liguero de navidad llegará el 19 de diciembre y la competición se reanudará el día 9 de enero de 2021. Otro descanso llegará con la Copa de España que se disputará entre el 25 y 28 de marzo y en el que los equipos de Segunda División gozarán de una jornada de descanso.

Un descanso más que merecido porque tener 17 equipos en competición la temporada que viene supone hacer 16 desplazamientos por toda la geografía española. Desplazamientos que poco o nada tendrán que ver con los del Grupo 1 de Segunda División B. Lejos quedarán los viajes de 1 hora a Valladolid o de 2 horas a Salamanca.

Lo más cercano, Madrid

De los 16 desplazamientos que tendrán que hacer los blanquiazules, 8 superan los 500 kilómetros. Lo más cercano que tendrá el Atlético Benavente serán los tres enfrentamientos en la Comunidad de Madrid. Móstoles, Rivas y el recién ascendido Leganés se encuentran a menos de 300 kilómetros de la localidad zamorana. Algo más lejos pero sin superar nunca los 400 kilómetros se encuentran los dos representantes gallegos como son Santiago Futsal y Noia al que se le suma el desplazamiento a Talavera de la Reina. Continuando de tura por España, los de Benavente se desplazarán hasta Zaragoza para enfrentarse al Colo Colo y hasta Manzanares, provincia de Ciudad Real. Dos viajes largos cercanos a los 500 kilómetros de distancia.

Vistos ya la mitad de los equipos, restan aún por conocer 8 desplazamientos más. Entre los 500 y 600 kilómetros, concretamente a 575, se sitúa la localidad jienense de Mengíbar. Pero si por algo se caracteriza esta competición es por abarcar un gran número de equipos de la costa mediterránea. Hasta 3 veces tendrán que viajar hasta la Comunidad Valenciana, allí les esperarán los equipos de Elche, Bisontes Castellón y Alzira. Visitarán también a los filiales de F.C. Barcelona y Pozo de Murcia y rendirán visita a otro nuevo inquilino de la categoría como es el equipo almeriense de El Ejido Bayyana. Por último y como desplazamiento más lejano, el Atlético Benavente se desplazará a una tierra que no trae buenos recuerdos entre sus seguidores. Deberá cruzar de nuevo el Estrecho de Gibraltar para enfrentarse al equipo que le apeó la temporada pasada en el Play Off, el Unión África Ceutí.

Una gran cantidad de kilómetros los que tendrán que hacer frente para mantener un proyecto ilusionante en una categoría que vuelve a tener un representante zamorano cinco temporadas después de que el FS Zamora disputase medio campeonato en la 2015/2016. El Atlético Benavente será también el único representante castellano leonés, ya que un histórico como el refundado Naturpellet Segovia desaparecía la temporada pasada.

Por el momento Benavente festeja lo conseguido por una generación de jugadores que ha escrito una nueva página en la historia ya no solo del club, también de la ciudad.