La Gimnástica Segoviana estará el próximo sábado en la final que decidirá a partido único frente al Zamora el titular de la plaza de ascenso a Segunda B para la temporada 20-21, al eliminar en la semifinal a la Arandina. Ninguno de los dos equipos fue capaz en los 90 minutos de batir la portería rival, situación que benefició a la Arandina, que hizo valer su mejor puesto en la liga regular, antes de que se interrumpiera por la pandemia del Covid-19.

El otro foco de atención para la afición zamorana estaba en el árbitro del encuentro, Daniel Piñuel Peña que también se está jugando su ascenso a Segunda División B. El colegiado zamorano realizó una correctísima actuación como quedó patente en que ninguno de los dos equipos protestó sus decisiones.

Como también ocurrió en la anterior semifinal, a los dos equipos les costó encontrar el ritmo de juego, tras cuatro meses sin competición. Poco a poco, especialmente tras el descanso para la hidratación de los jugadores, la Segoviana se fue afianzando en el terreno de juego y dispuso de las mejores oportunidades para marcar.

En el segundo tiempo, también de forma paulatina, la Arandina, consciente de que necesitaba marcar para clasificarse para la final, fue asumiendo el control del juego. El conjunto burgalés dispuso de una doble oportunidad a pocos minutos para el final, con dos balones a la madera, pero aunque lo intentó hasta el final no pudo conseguir el ansiado gol.

Zamora y Segoviana se jugarán pues el título de Campeón del grupo VIII de la Tercera División y la correspondiente plaza de ascenso a Segunda B el próximo sábado, 25 de julio, también en el Estadio de la Nueva Balastera y a puerta cerrada.