Diez años han pasado ya del zapatazo con el que Iniesta metió a España en el olimpo del fútbol. Un recuerdo imborrable que rememoramos letra a letra.

A (Alemania)

Una de las favoritas al título que fue víctima de España en las semifinales. Algunos jugadores aún estan preguntándose de qué aeropuerto despegó Puyol para rematar aquel córner que sirvió Xavi. Como si fuera un avión (¿o era un caza?). Hasta aquella derrota (el 1-0 no refleja el baño que le dio el conjunto de Del Bosque, Alemania pisaba fuerte en Sudáfrica. Dieron fe de ello Inglaterra (4-1) en octavos y Argentina (4-0) en cuartos, por ejemplo. Los Neuer, Schweinstger, Podolski, Klose, Kroos, Lahm, Mertesacker, Khedira, Müller, Özil, Wiese, Boateng, Mario Gómez y compañía acabaron terceros tras derrotar a Uruguay en una entretenida final de consolación (3-2).

B (Busquets)

Sobre 'Busi' se habló mucho en aquel Mundial, el primero que disputaba en su carrera. Bueno, solo tras el primer partido. Aquella derrota contra Suiza (0-1) provocó muchas críticas al doble pivote que formaba con Xabi Alonso. De hecho, el de Badia fue uno de los sustituidos en aquel encuentro. Pero Vicente del Bosque no se inmutó y siguió a lo suyo. No era de extrañar porque el técnico ya lo dijo en su día: si volviera a ser futbolista le gustaría ser como el centrocampista azulgrana. Así que el mediocentro siguió siendo titular en todos los partidos, nunca más fue cambiado y el debate se acabó cuando llegaron las victorias. O sea, a los dos días.

C (Casillas)

Iniesta se llevó los aplausos por haber anotado el gol que dio la gloria eterna a la selección española pero otro compañero, minutos antes, fue tanto o más decisivo que él: Iker Casillas. El guardameta aguantó un uno contra uno ante un Robben lanzado y en el último suspiro salvó el tanto con alguna uña del pie derecho. No fue la única intervención de mérito: el madrileño se pasó todo el Mundial demostrando que era el mejor del planeta en su puesto (aquel penalti que paró a Paraguay en cuartos de final...). Por eso fue elegido Guante de Oro como mejor zaguero del campenato. También fue el más atrevido: menudo beso le robó a Sara Carbonero ante las cámaras.

D (Del Bosque, Vicente)

El salmantino había sido escogido como el relevo de Luis Aragonés, que ganó la Eurocopa del 2008 con un estilo alejado de la furia, en una decisión coherente porque el exentrenador del Real Madrid también era amante del 'tiki taka'. Con un carácter menos volcánico que su antecesor, supo manejar con temple y sentido común un grupo talentoso y ganador para llevarlo a la cima del mundo. Y todo ello sin afán de protagonismo.

E (Eurocopas -2008 y 2012-)

De acuerdo. Estamos escribiendo el abecedario del Mundial del 2010. Pero desde la óptica de la selección española, no se entendería aquel triunfo sin la Eurocopa conseguida dos años antes en Austria y Suiza. El seleccionador fue Luis Aragonés, que sentó las bases del estilo de juego (el 'tiki taka') y creó el grupo que lo supo interpretar, con figuras destacadas como Casillas bajo los palos, Xavi (elegido mejor jugador del torneo) e Iniesta en la sala de máquinas, y Villa rematando la faena (fue el máximo goleador, con 4 tantos). Tras el logro de Sudáfrica, en el 2012, llegó otra Eurocopa, la de Polonia y Ucrania (final ganada a Italia por 4 a 0), con la que se cerró uno de los ciclos más gloriosos del fútbol mundial.

F (Forlán, Diego)

Triunfó España, pero curiosamente el trofeo para el mejor jugador del torneo se lo llevó Diego Forlán. El delantero uruguayo, que por entonces militaba en el Atlético de Madrid, ganó el Balón de Oro, entre cuyos candidatos estaban Xavi, Iniesta y Villa. El charrúa anotó cinco goles, los mismos que el asturiano, el alemán Müller y el holandés Sneijder, y su selección quedó cuarta. Además, marcó el gol más bonito: una volea desde el borde del área en el partido por el tercer lugar ante Alemania. Méritos suficientes para la distinción, según los periodistas acreditados en el Mundial, encargados de la votación.

G (Gelson Fernandes)

Suiza siempre podrá presumir de haber sido la única selección que ganó a España en el Mundial. Tras aquella derrota en el debut (0-1), la futura campeona contó los seis partidos restantes por victorias. Pero aquel gol de Gelson Fernandes impidió el pleno. Fue un tanto feo, marcado casi a trompicones, tras unos rechaces en el área. Aquel centrocampista de origen caboverdiano nacionalizado suizo fue un trotamundos del fútbol: jugó en el Sion, el Manchester City, el Chievo Verona, el Leicester, el Udinese, el Sporting de Lisboa, el Friburgo, el Stade de Rennes y el Eintracht de Fráncfort, donde se acaba de retirar con 33 años.

H (Holanda)

Hoy en día debería estar en la P de Países Bajos, pero hace 10 años llegó a la final como Holanda, y vestida como Holanda de siempre: de naranja-naranja. Entrenada por Bert van Marwijk, entre sus jugadores más destacados figuraban Robben, Van der Vaart, Van Persie, Van Bommel, Sneijder, Van Bronckhorst y Huntelaar. Nivelazo que, sin embargo, no le sirvió para recordar a aquella 'Naranja mecánica' de Cruyff y compañía que tanto deslumbró en los años 70. Tampoco le importaba porque solo quería ganar aunque su juego no fuera vistoso. No le valió de nada; España, pese a las patadas y agresiones sufridas, la exprimió en la final.

I (Iniesta)

El 'iniestazo' es, para los culés, el gol agónico que metió por toda la escuadra al Chelsea en las semifinales de la Champions del 2009. Pero, para los seguidores de la selección española, el 'iniestazo' es el que marcó a Stekelenburg en la final del Mundial. Su celebración, recordando a su desaparecido amigo Dani Jarque en la camiseta, fue otro golazo de los que marcan época. Antes de aquel momento estelar, 'don Andrés', que había llegado al campeonato tras sufrir varias lesiones musculares, había sido elegido mejor jugador del partido contra Chile, en la fase de grupos, y fue candidato a mejor jugador del torneo.

J (Johannesburgo)

Nunca antes el continente africano había acogido un Mundial de fútbol. La elección de Sudáfrica como sede fue una apuesta segura tanto por sus infraestructuras para acoger un evento de esta magnitud como por su experiencia en otros campeonatos como el Mundial de rubgi del 2005 y la Copa Confederaciones del 2019. Johannesburgo, que no es la capital de Sudáfrica (¡y eso que el país tiene tres!), tuvo un papel protagonista porque no solo acogió el partido inaugural y la final en el Soccer City (también acogió otros seis encuentros), sino que otro estadio de la ciudad, Ellis Park, fue escenario de otros siete duelos.

K (Kaká)

Kaká era una de las estrellas de Brasil, eterna aspirante al título que en Sudáfrica fracasó y no pudo pasar de cuartos de final, como solía ocurrirle a España años ha. Países Bajos (Holanda entonces) la echó del Mundial. El flamante fichaje del Real Madrid no anotó ni un gol y, como si fuera un reflejo de la selección 'verdeamarela', pasó de puntillas por el torneo. Una pena, porque en aquel equipo jugaban Júlio César, Maicon, Luis Fabiano, Dani Alves, Thiago Silva, Robinho, Júlio Baptista... Tan poco gustó lo que hizo aquel equipo que su entrenador, Dunga, no tuvo más remedio que dimitir al acabar el campeonato.

L (Leo Messi)

No fue el Mundial de Leo Messi, y eso que Maradona, a la sazón seleccionador de la albiceleste, proclamó: "Tuve al mejor Messi y se lo digo en la cara a cualquiera. Hizo figura a todos los porteros". No le falta razón ya que fue incapaz de anotar un solo gol en los cinco partidos que jugó, en los que sufrió 15 faltas (fue el jugador argentino que más recibió). Alemania le paró los pies en cuartos de final con un doloroso 4-0. La misma Alemania que, cuatro después pero esta vez en la final, le impidió coronarse como campeón del mundo (1-0).

M (Minuto 116)

El minuto. El que todo aficionado al fútbol español recordará el resto de su vida. El momento en que Cesc se la dio a Iniesta y el de Fuentealbilla, todo temple, la reventó a la red de Holanda con un derechazo imponente mientras el tiempo parecía detenerse. Y sí, se detuvo en ese justo instante. Y sigue ahí, detenido en la memoria de todos.

N (Normalidad)

Un Mundial en África despertaba recelos, y en Sudáfrica se temía por la seguridad, uno de los puntos flacos del país. Pero el campeonato transcurrió con total normalidad gracias a la buena organización y al despliegue para evitar delitos de todo tipo. Todo ello hizo que la calificacion general superara el aprobado.

Ñ (Ñu)

El Mundial puso el foco sobre Sudáfrica, un destino muy deseado para los aficionados a los safaris. En rincones como el parque Kruger se pueden ver animales como ñus, leones, guepardos, rinocerontes, cocodrilos, elefantes, cebras, búfalos... Pero el país también merece el viaje por ciudades como Ciudad del Cabo, considerada como una de las nuevas siete maravillas naturales del mundo, por playas como las de Walker Bay (vírgenes y con aguas llenas de ballenas y tiburones blancos), y por sus valles cubiertos de viñedos.

O (Olvidados)

Es fácil recordar a Casillas, a Iniesta, a Xavi, a Villa, a Busquets, a Puyol, a Piqué, a Ramos, a Xabi Alonso... Fueron titulares y todos ellos rayaron a un nivel excepcional. Pero la selección contó con suplentes que en algunos casos no jugaron ni un minuto. Los olvidados por los aficionados, la 'otra' selección, estuvo formada por jugadores como Víctor Valdés,Pepe Reina, Raúl Albiol, Carlos Marchena, Juan Mata, Álvaro Arbeloa, Fernando Llorente, David Silva y Javi Martínez.

P (Paul, el pulpo)

En el mundo no ha habido pulpo más famoso que Paul, estrella del acuario Seelife de Oberhausen (Alemania). Era el oráculo al que todos acudían para saber quién iba a ganar un partido. Adivinó la victoria española en la semifinal y en la final, entre otros muchos aciertos. Su método era sencillo: elegía la almeja de alguno de los dos contenedores con las banderas de las selecciones que se iban a enfrentar.

Q (Quejas)

El Mundial de Sudáfrica tuvo muchísimas polémicas arbitrales, y las quejas por la actuación de los jueces fueron continuas. Sudáfrica, Argentina, Costa de Marfil, Estados Unidos, Suiza... protestaron. Sin ir más lejos, el colegiado de la final, Howard Webb, reconoció: "He pasado las dos peores horas de mi carrera". Tuvo que enseñar 13 tarjetas amarillas y expulsar a Heitinga en un encuentro durísimo por parte de los holandeses, que aún así se quejaron amargamente del papel del británico. "Es un escándalo, nos ha robado", lloró Sneijder. Durante el campeonato, México y Paraguay fueron eliminados por sendos errores de los jueces, y el nivel general del arbitraje fue tan bajo que se abrió por fin en la FIFA un debate sobre el uso de la tecnología para ayudar a los colegiados, cosa que sucedió pocos años después.

R (Reina, Pepe)

El 'showman' del equipo no jugó ni un minuto pero siempre estaba dispuesto a generar buen rollo en la selección. Su mejor actuación llegó con la celebración del título ya en Madrid, frente a miles de aficionados. Entonces se creció y dedicó unas palabras a sus compañeros. Estas son algunas de ellas: "Piqué, el central del mundo [...] Puyol, tarzán de África [...] 'Sweet' Iniesta [...] El 7, el gol de España, tiene un nombre, David Villa [...] El 8, la batuta, por aquí, por allá, Xavi Hernandez [...] Víctor Valdés, la pantera de L'Hospitalet [...] Juan Mata, el amigo del amago [...] Xabi Alonso, el pulmón, con heridas de guerra por su país, por España [...] Busquets, el quitanieves, el de los tentáculos, el que da, quita, roba y hace jugar [...] Pedrito, auténtico e inigualable, que va a su cama y en su cama corre [...] Vicente del Bosque, la bondad en persona, el hombre correcto, el míster que nos ha traído hasta aquí, que nos ha hecho ganar la amarilla, la que todos queríamos".

S (Sara Carbonero)

El Mundial de Sudáfrica también fue el Mundial del amor, al menos en la selección española. Piqué inició un romance secreto con Shakira tras participar en el videoclip de la canción oficial del torneo, y Casillas quiso hacer público (por si alguien aún no lo sabía) su noviazgo con Sara Carbonero, entonces una de las periodistas a pie de campo que recogía las declaraciones de los jugadores. "Habíamos sufrido bastante y ella lo pasó mal con las críticas sobre que me distraía. Fue un bonito final para todos. Ella no lo sabía, actué sin más y surgió", explicó el portero después del beso que le robó ante la cámara.

T ('Tiki taka')

Dice la Wikipedia que el 'tiki taka' "es un estilo de juego en fútbol que se caracteriza por el uso de pases cortos y precisos en las transiciones, búsqueda constante del espacio y movimiento de balón, y el mantenimiento de la posesión". Más o menos, viene a describir el estilo que encumbró a la selección española en Sudáfrica. Popularizó la expresión el periodista Andrés Montes en el Mundial del 2006, aunque ya en los años 80 lo usaban los entrenadores José María Maguregui y Javier Clemente para ridiculizar su supuesta falta de verticalidad de algunos equipos.

U (Uno a cero)

Por mucho que jugara bien (y jugó bien), y su propuesta futbolística fuera atractiva y ambiciosa (y lo era), y contara sus partidos por victorias (salvo la derrota inaugural), a España le costó horrores marcar goles. Basta repasar sus estadísticas en el torneo para descubrir que venció siempre por la mínima salvo contra ¡Honduras! (2-0). Y solo en otro encuentro volvió a anotar dos tantos (Chile, 2-1). El resto fue siempre la misma historia: 1-0, 1-0, 1-0, 1-0... Así fue como se convirtió en la campeona del mundo menos realizadora de la historia. A su favor estuvo su fortaleza defensiva: solo dos goles encajados en siete partidos.

V (Vuvuzela)

Afortunadamente, lo de las vuvuzelas fue una moda pasajera. De otro modo, los aficionados a los estadios habrían acabado sordos, si es que no lo hicieron entonces. Estas trompetas alargadas que emiten un sonido similar al barritar de un elefante o al zumbido de una abeja (pero multiplicado por miles de seguidores armados con ellas) hizo que la FIFA se planteara su prohibición meses antes de empezar el Mundial. Hasta los jugadores se quejaron e incluso las televisiones adaptaron un filtro para que no les fastidiaran la transmisiones.

W ('Waka Waka')

El fútbol de 'tiki taka' de la selección española rima con 'Waka Waka (Esto es África)', la canción oficial del Mundial. Bien serviría para animar vídeos de los goles de Villa o de las paradas de Casillas. La interpretaba Shakira, que incorporó parte de una canción muy popular en muchos países africanos. Aun así, fue acusada de plagio por Wilfredo Vargas, que a su vez admitió haberse 'inspirado' en otra pieza camerunesa para componer 'El negro no puede'. Por cierto, ¿sabías que Shakira y Piqué se conocieron en el rodaje del videoclip de esta pieza?

X (Xavi)

Amo y señor del centro del campo en la selección y en el Barça, no ha habido otro centrocampista con tal capacidad para marcar el ritmo de los partidos como él. Si tiene los ojos un poco achinados es porque ve delante, a los lados y probablemente a su espalda, y eso mientras lleva el balón pegado al pie o da vueltas sobre sí mismo con él mareando a los rivales (se llama 'pelopina' en recuerdo a su apodo, 'Pelopo'). Xavi fue elegido mejor jugador del partido en los octavos ante Portugal y en la 'semis' ante Alemania. Bajo su batuta (dio 699 pases, seis más que toda Nueva Zelanda) ganó España el Mundial.

Y (Yayo)

Con 32 años, el jugador más veterano de la selección era Joan Capdevila, jugador del Villarreal. Pepe Reina lo definió en su discurso de celebración como "el incombustible y feo de cojones". Su gracia fue, como mínimo, dudosa. Cuenta la leyenda que, sabedor de sus limitaciones técnicas y nervioso ante la inminente final, le dijo a Iniesta minutos antes del partido de su vida: "Cuando tenga la pelota, yo te la pasaré a ti, pero tú bajo ningún concepto deberás pasármela a mí". No era el más viejo del torneo; el yayo del Mundial fue David James, portero inglés, que fue alineado con 39 años, 10 meses y 26 días en el Alemania-Inglaterra (encajó los cuatro tantos de la derrota de su equipo, 4-1).

Z (Zakumi)

La mascota del Mundial fue un simpático leopardo (futbolista, claro) con el cabello verde, cuyo nombre se formó con las letras ZA, código ISO del país, y 'kumi', que en varias lenguas africanas significa 'diez'. Nadie le culpará por no recordarlo. Hoy ocupa un lugar en el cementerio de las mascotas olvidadas entre el león de Alemania-2006, y Fuleco, el armadillo de Brasil-2014.