Con 24 años recién cumplidos, el ciclista del Bici Montaña Lopenta - Watts Lab ha dejado atrás semanas de duro confinamiento en su casa de Benavente y ahora disfruta de la libertad que su bici y la carretera le otorgan sin límite, ni horario ni geográfico debido a su condición de Deportista de Alto Nivel (DAN). Y es que Álvaro Lobato es uno de los cinco deportistas catalogados como DAN residentes en Benavente que disfrutan de ese permiso especial, algo que el benaventano esperaba como agua de mayo. "Los primeros días que podíamos salir, pero con limitaciones, me volvía loco dando vueltas por Benavente. Incluso había días que prefería quedarme en el rodillo antes que salir a dar vueltas por la Avenida del Ferial. Ha sido un gran alivio".

Álvaro Lobato sufría una aparatosa caída la temporada pasada que le ha obligado a pasar tres veces por quirófano. Intervenciones que han dejado como resultado una movilidad reducida en sus muñecas, aunque reconoce que este parón obligado le ha ayudado para ponerse al nivel de sus rivales. "Al principio fue muy duro, sobre todo la primera semana, porque me veía otra vez en el rodillo después de un año entero subido en él, pero a partir de ahí, tanto mi entrenador como yo lo hemos visto como una oportunidad para ponernos a la altura de nuestros rivales. Si levantasen ahora mismo el confinamiento y se pudiese competir, estaría en los puestos de arriba" asegura entre risas el benaventano.

Después de entrenamientos de doble sesión en casa, salir a rodar por las carreteras ha sido un alivio para el ciclista benaventano. Lejos de recibir insultos o críticas durante los primeros días que el joven entrenaba al aíre libre, Álvaro Lobato ha disfrutado de la tranquilidad que da compartir asfalto con un menor número de vehículos. "Siempre se agradece que haya menos coches, antes me cruzaba con 20 o 25 en la misma carretera y ahora solo con 5" indica el joven. A nivel de entrenamientos, Lobato recibe desde Madrid las indicaciones de su entrenador siguiendo una preparación de calidad, aunque como él mismo reconoce, enfocada al largo plazo por las dudas del calendario. "Estoy trabajando, pero con la incertidumbre de no saber para qué ni para cuando, porque no se cuando voy a necesitar mi pico de forma".

Con la vista puesta en el futuro más cercano, Lobato asegura que no quiere otro año en blanco como el que vivió la temporada pasada y opina que las carreras que se celebren de aquí a final de temporada ya sean campeonatos nacionales o grandes vueltas, serán por y para justificar contratos. La opinión del corredor no es muy optimista de cara a la celebración de pruebas en territorio nacional, por lo que no descarta participar en alguna prueba extranjera. "Si el calendario nacional no se abre, es decir, no se disputan carreras en España, estoy hablando con el equipo para hacer pruebas en el extranjero, quizás en la Copa del Mundo. Es algo que estamos hablando, pero es la idea que tenemos. La idea es utilizar los recursos que iban a ir para esas carreras y aprovecharlos para competir fuera. No quiero dos años en blanco".

Un futuro que podría comenzar a finales de verano y para el que el joven no solo se prepara físicamente. La realidad es que la financiación a través de patrocinios deportivos va a ser un dolor de cabeza para deportistas y clubes a partir de ahora, un camino aún más difícil para Álvaro Lobato quien llega con su palmarés en blanco después de un año parado. "Es difícil ir a la puerta de un patrocinador en estos momentos y pedirle que te ayude después de un año parado y en la situación en la que estamos. Por suerte algunos de los que tengo este año ya han pagado, otros han pagado a medias y otros te dicen que ahora no pueden porque tienen sus empresas cerradas" indica con resignación.

Sea en septiembre o cuando el calendario lo permita, el objetivo de Álvaro Lobato no dista mucho al de otros deportistas que es retomar la competición, pero quizás el benaventano sí que tenga ese punto extra de motivación y de querer hacer bien las cosas después de tanto tiempo en el dique seco. "Solo quiero volver a sentirme competitivo, con eso me conformo. No pido un primer puesto o un podio, quiero tener la sensación de volver al lugar donde un día estuve".