Uno de los deportistas zamoranos que tal vez acuse más el confinamiento y la prohibición de salir a correr sea José Luis Posado, el ultrafondista del Vino de Toro Caja Rural que se somete habitualmente a fortísimas sesiones con largas tiradas de kiómetros como preparación para sus competiciones que también se han visto suspendidas por el coronavirus. No está resultando sencillo para el esforzado "Forrest Gump" zamorano alternar su ocupación laboral como funcionario en la Fiscalía y la obligación de estar confinado en su domicilio; y no sólo está siendo duro por la imposibilidad de salir a correr, lo que es para él una verdadera obsesión, sino también porque tiene que sufrir la cuarentana sin su compañera, la también ultrafondista Mary José Tomaz, que se ha visto retenida en Brasil, a donde había viajado para pasar el verano con su familia.

"Que más quisiera que poder salir a correr un rato, pero el lunes -por hoy- toca estar en la Fiscalía pero el 26 de abril voy a salir a entrenar como siempre de madrugada y no se cuando regresaré a casa. Voy a disfrutar como nunca", asegura el veterano atleta tan vez en un exceso de optimismo sobre la fecha en que podrá regresar a su vida normal que se centra casi exclusivamente en su trabajo como funcionario del Ministerio de Justicia y en unas ultramaratonianas sesiones de carrera continua de madrugada y en compañía de María José Tomaz.

Posado no dispone de cinta para correr en su casa, aunque tampoco la echa mucho de menos ya que no la considera muy operativa en un piso. Pero sí se está planteando ahora poder conseguir una elíptica que se adaptaría mucho más a los programas de preparación que lleva a cabo habitualmente en el gimnasio Energym.

José Luis Posado ha sido un gran especialista en la cinta de correr y hace algunos años protagonizó varios intentos de récord mundial de distancia sobre este aparato, pero ahora reconoce que puede molestar a sus vecinos si dispusiera de una en su casa: "La verdad es que lo estoy pasando bastante mal porque yo no puedo estar tirado en el sofá todo el día. Además duermo muy mal porque tenía adaptado el sueño a levantarme a las 3.00 de la madrugada para salir a correr y ahora me veo encerrado".

De esta forma, su principal actividad física se centra en hacer pesas y otro tipo de ejercicios para intentar no ganar peso: "Es muy duro porque me falta lo que me activa que es salir a correr con Mary José Tomaz, aunque ella sí puede hacerlo allí en Brasil". "No duermo, me despierto mucho por las noches y me cuesta mucho porque el cuerpo no está activo", añade el corredor zamorano.

Tomáz de Aquino, una de las mejores ultrafondistas de sudamérica, pasaba unos días en Brasil disfrutando del veraneo con su familia y tenía previsto regresar a finales de abril, pero la extensión de la pandemia hizo que se suspendiera el vuelo y ahora confía en que pueda conseguir otro para primeros de mayo.

Ambos tenían previsto participar en las 24 horas de Valencia los próximos días 18 y 19 de abril, pero la prueba se ha retrasado a septiembre; y en mayo, Posado pensaba competir en los 6 Días de Hungría; e incluso ve amenazada su participación en los 100 Kilómetros de Santander, previstos para junio.