La final de la Copa del Rey de rugby que iba a disputarse en Zamora está hoy más lejos de ser una realidad tras anunciar ayer la Asociación de los clubes de División de Honor de Rugby (ANCRDH) que decreta la suspensión de todas las actividades hasta el comienzo ordinario de la próxima temporada por unanimidad de todos sus miembros.

Según manifestó ayer la ANCRDH, este ente "ha presentado a lo largo de las últimas semanas diversos escritos en los que manifestaba su preocupación por la situación sanitaria y social de este país y solicitaba la suspensión de la competición 2019-2020", aunque la Federación Española de Rugby (FER) determinó el pasado viernes que esperaría hasta el día 30 de abril para tomar una decisión. Una discrepancia que, ante la nula respuesta de la FER que la ANCRDH califica como "ajena a los problemas que la pandemia está generando", ha decidido dar por terminada la campaña. Una solución que toma "siguiendo el ejemplo de los estamentos reguladores del rugby de otros países".

Con su decisión, los clubes aseguran que "no disputarán ningún partido más esta temporada" ya que consideran que "no es tiempo para preocuparse de competiciones". Postura que hace casi imposible que se disputa en el Ruta de la Plata la final de la Copa del Rey que iban a jugar el Lexus Alcobendas y el Silverstorm El Salvador.

El encuentro, que iba a celebrarse el próximo mes, había sido aplazado al mes de septiembre por la federación pero, al pertenecer esta campaña, los clubes podrían negarse a jugarlo. Eso sí, cabe la posibilidad que la propia Federación opte por modificar el calendario de la próxima campaña (2020-2021) e incluya la cita copera en Zamora como parte de la pretemporada para los equipos de División de Honor. Una de las posibles soluciones para evitar su definitiva cancelación.